PESIMISMO
PESIMISMO
Entre Columnas
Martín Quitano Martínez
X: @mquim1962
Partiendo del pesimismo de la realidad
avancemos con el optimismo de la voluntad.
Antonio
Gramsci
Dicen que la soberbia es mala
consejera, abandonar la capacidad de entender o valorar condiciones ajenas a
uno suele llevar a sorpresas, no creer que en lo político y social lo que hoy
es mañana no necesariamente estará implica pensar la vida pública en la visión
única que hoy algunos quieren concebir de nuestros momentos políticos y en esa
visión acometen sus acciones con una perversa vitalidad que los descarrilara más
temprano que tarde.
Subidos en el poder por mil
años dejan para otros el pensar en la incertidumbre, arropados en la verdad
incuestionable dictada desde los cielos cada mañana solo miran sus realidades,
esas que abandonan el escrutinio mínimo de lo que pasa realmente, que cierran
oídos a voces que llaman a la atención más allá de la voz única, el alboroto
del México con graves y visibles problemas no existe ante ojos que no ven
porque todo está en las nebulosas construidas desde quien rige en su verdad
incuestionable.
La seguridad que profusamente
difunden de que nada cambiara para el 2024 se presenta en el arropo, en la
cobertura que establecen como inamovible de la popularidad de sus dirigente
máximo, nada, dicen, podrá minar esa condición y con él, el triunfo está
asegurado, lejos les quedan resultados desastrosos de los ejercicios públicos,
el incumplimiento de lo prometido, la incompetencia mostrada, todo se puede
compensar con los programas sociales, los mismos servirán como la gran
plataforma que sostenga la continuidad.
Para algunos sectores que
miran lo anterior se les forman sombras que, ominosas, no lograrán ser
iluminadas para que desaparezcan, el pesimismo toca la puerta con fuerza de
muchos que, aun conociendo y rechazando las condiciones existentes, arrían
banderas. El efecto buscado es logrado, este arroz ya se coció y nada se puede
hacer, creo que no es así, aún queda mucho por ver y más por hacer, aún hay mucha
esperanza y pundonor, aún hay inteligencia y ganas que no ceden ante el empuje
de unas sombras que oscurezcan lo central de los procesos electivos que nos
debemos todos exigir y es que en ellos siempre los resultados son inciertos.
De cara a lo que se vive en
retrocesos evidentes, de controles al más viejo y rancio comportamiento solo la
fortaleza de una sociedad civil que busque ser protagonista de un debate
político que impida regresiones puede significar que los destinos no son
manifiestos, que el presente y el futuro se construyen palmo a palmo, y día a día,
frente a los pesimismos el optimismo que se sostiene en el actuar por
garantizar conquistas de un largo proceso democrático que requiere ajustes,
mejoras en sus logros pero que ha contra mano no puede ser arrollado por la
negligencia y el autoritarismo.
Mucho ha costado implementar
pesos y contrapesos legales e institucionales, romper inercias corporativas,
mucho hay que hacer para reforzar la transparencia y la rendición de cuentas
que pasen de la simulación a los hechos, larga es la ruta para enfrentar la
pobreza y la inseguridad y la violencia, no se puede retroceder en los derechos
con el desprecio de reducirlos a que “son nuevos”, no se pueden ocultar los
pendientes y los retos de nuestra travesía democrática con la idea de la
inédita felicidad encontrada y reconocerlo implica no permitirse que gane el
pesimismo.
DE LA BITÁCORA DE LA
TÍA QUETA
La iniciativa de
recorte al Poder Judicial de la Federación, la apuesta por socavar a otro poder
de la República.