PIDEN MÁS AVIONES… Y CRECERÍAN PÉRDIDAS
PIDEN MÁS AVIONES... Y CRECERÍAN PÉRDIDAS
Juan
Carlos Villeda Puerta
Agencia
Reforma
Ciudad
de México 23 abril 2024.- La turbulencia en la que se desplaza Mexicana de
Aviación puede empeorar, según se desprende de proyecciones financieras que el
Ejército mexicano elaboró para solicitar mayor gasto para aviones y equipo.
La
Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) pidió a la Secretaría de Hacienda
otros 20 mil 871 millones de pesos para la adquisición de aeronaves
«equipo de apoyo en tierra y herramientas necesarias para su
operación» que serán ejercidos entre 2024 y 2027.
Según
proyecciones financieras de Sedena, Mexicana tendría ganancias a partir de
2028, siempre y cuando sus ventas anuales de boletos excedan de 6 mil 616 millones
de pesos, equivalentes, por ejemplo, a 12 por ciento de los ingresos de Volaris
en 2023.
Ejecutivos
de aviación privada consultados dijeron que las tarifas aéreas de la aerolínea
del Estado tendrían que ser de más del doble y con aviones llenos de pasajeros
para que esas proyecciones tuvieran lógica.
De
acuerdo con un «análisis de rentabilidad», Sedena estima gastos de
operación y mantenimiento de 162 mil 692 millones de pesos durante veinte años
a partir de 2028, con la aerolínea registrando pérdidas nuevamente hasta 2043
por el crecimiento de dichos costos.
Expertos
en aviación privada opinaron que si se hablara de la operación de 20 aviones,
adquiridos con ese recurso, y conforme el «análisis de rentabilidad»
militar se estiman ingresos totales del orden de 580 millones de dólares al año
o 29 millones de dólares por aeronave, cifra que no es creíble.
«Eso
sería superior al ingreso por avión obtenido por Volaris, según sus datos
financieros que son públicos y de los cuáles se desprende que en 2023 tuvo
ingresos de 25 millones de dólares por aeronave que tienen casi el doble de
capacidad de los aviones tipo Embraer que presumiblemente está buscando
Mexicana», estimó uno de los expertos.
La
proyección estima costos operativos y de mantenimiento que crecen 5 por ciento
por año.
«Ese
planteamiento deriva en un flujo de efectivo negativo a medida que avanza el
periodo de análisis, lo que financieramente se percibe y proyecta como un
fracaso del negocio», se indicó.
«Más
que una inversión huele a gasto. El plan de negocios, si es que existe,
difícilmente aguantaría un análisis por parte de profesionales del
aerotransporte… es difícil suponer que los 21 mil millones van a tener un uso
productivo», comentó Juan Antonio José, experto en la industria aeronáutica.
«La
falta de trasparencia lo que hace es demostrar que el modelo de negocio no
pasaría los exámenes, y los análisis hechos por personas que conozcan del
medio», reiteró.
«Las
proyecciones financieras que tiene Hacienda sobre la operación de Mexicana
hasta el 2047 dejan claro que la aerolínea es un negocio terrible»,
expresó otro analista financiero que solicitó el anonimato.
El
especialista explicó que el valor presente neto de los flujos operativos
proyectados de la aerolínea apenas suma 101 millones de pesos, mientras que la
cifra correspondiente al valor presente neto de las inversiones supera los 13
mil 700 millones de pesos.
Fernando
Gómez, otro especialista del sector aéreo, opinó que es poco clara la
justificación oficial.
«Hay
que asegurar los montos de inversión de estos cuatro años y conocer con cuánta
flota va a operar, sueldos y salarios, gastos operativos y reinversiones y
reparto de utilidades. Aunque sea una empresa que se le dio una asignación, que
no busca fines de lucro debe de buscar su autonomía financiera», reiteró.
Mexicana
de Aviación, bajo administración militar, opera desde diciembre con tres
aeronaves Boeing prestadas por los militares y dos Embraer rentadas a la
empresa TAR.
Recientemente
el gobierno admitió haber sido estafado por la empresa Aeroholdings con la que
habría pactado el arrendamiento de 10 aeronaves, con tripulación y servicios de
mantenimiento.
La
empresa demandó al gobierno mexicano por presunto incumplimiento de contrato y
la administración federal contrademandó.
En su
solicitud de recursos la Sedena censuró en su totalidad las 316 páginas de los
estudios socioeconómicos, de mercado y factibilidad técnica, por lo que se
desconoce cuántos aviones pretende adquirir, bajo qué modalidad de compra o
arrendamiento o si ya existe algún contrato.