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POR AMOR A LA CAMISETA

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Colección Épica*

POR AMOR A LA CAMISETA

UNIDAD MODELO

Su misión está en el nombre.

Por Héctor Larios Proa

Como en muchas partes del mundo, donde rueda un balón, nacen amores redondos. La pasión por el futbol se extiende a una comunidad, a otra y otra más sin distingo, así nació el amor a la camiseta, a sus colores.

Un equipo de futbol representa algo más que un grupo de deportistas, sus redes se extienden a la grada, a un barrio, ciudad o estado a través de la competencia. Esa es la vida profesional de nuestro personaje: “Toño” Pérez.

Corría el año de 1950, la constructora ICA (Ingenieros Civiles Asociados), levanta un complejo habitacional: la Unidad Modelo, en el corazón de Guadalajara, Jalisco, en su diseño destaca una cancha futbol de tierra.

Jóvenes visionarios advirtieron más que un simple terreno de juego, un espacio social de re-creación. Entusiastas muchachos, conocedores del talento, con metas claras le dieron forma al nacimiento del Club Unidad Modelo, encabezados por Juan Pérez Contreras, fundador y presidente.

Comenzaron con equipos de futbol infantil, los vecinos de la Unidad vieron con agrado el plan y otorgaron su apoyo a la familia Pérez Contreras, que dieron a luz el proyecto para abrirse camino en una ciudad netamente futbolera, Guadalajara.

Bajo la batuta de Juan, el mayor de los hermanos, armaron la estructura del club hasta lograr 12 categorías desde los más pequeños hasta la antesala del futbol profesional en Jalisco. Se reunían en casa de su señora madre, donde celebraban las juntas, citas, festejos, posadas.

Años después tuvieron equipos de béisbol y atletismo. Pasaron miles de niños y jóvenes que escribieron con sudor su historia durante 71 años. Con orden, dirección y disciplina alcanzaron títulos y reconocimiento nacional e internacional. Unidad Modelo es un caso de éxito como pocos en el país.

Una pieza fundamental es “Toño” Pérez, que inició en equipos infantiles del Audax y llegó hasta la Reserva Amateur. Hombre de palabra, buena memoria, notable publirrelacionista, conciliador, ecuánime y con gran capacidad de organización se abrió paso en su carrera deportiva que lo llevo de jugador, entrenador titulado, presidente de la Asociación de Jalisco y hasta llegar a la presidencia del Sector Amateur de la Federación Mexicana de futbol, A.C., por méritos propios.

Siempre nos tendió la mano a cientos, tal vez miles de personas que, sin conocer, abrió las puertas de su casa y su corazón, siempre ha tenido las palabras justas para el momento adecuado, orientador y solidario por naturaleza, cómplice de sueños y facilitador de herramientas para que los jóvenes alcancen sus metas.

Entrevistador (E): ¿Qué es el futbol amateur?

“Toño” (T): Es el orgullo de pertenecer al barrio, jugadores con calidad hay, los jóvenes requieren de oportunidades para sobresalir, pero nada se puede lograr sin esfuerzo y disciplina.

En su entorno el futbol, significaba algo más que juego y competencia, era un instrumento de formación.

T: Había equipos como TEOS, del padre Sandoval, que tenían su equipo, también estaba el Deportivo Oratorio Salesiano, su prioridad era formar seres humanos con valores.

Así nosotros establecimos un orden disciplinario desde nuestra imagen, los uniformes siempre fueron los mejores de la época, la familia Pérez sufragaba los gastos, los jugadores pagaban una módica cuota de 10 pesos mensuales.

Zapatos bien boleados, uniforme limpio y buen futbol fueron detalles importantes que nos dieron un lugar y reconocimiento en la entidad que se reforzó con triunfos. Además, nos ganamos el apoyo de los padres de familia que confiaron en nosotros porqué inculcábamos valores y estilos de vida. Comenta satisfecho el famoso “Toño” Pérez.

En el año 1955 ingresaron a la Asociación de Futbol de Jalisco, jugaron en otros municipios, lograron muchos campeonatos en infantiles y juveniles, en la Liga Especial y la Liga Poniente, además de 18 Títulos, 15 de Primera División Amateur. Siete en forma consecutiva y 2 más que fueron muy sonados, en la Reserva Profesional, enfrentando a Atlas, las Chivas, Universidad de Guadalajara y los Tecos y un campeonato de Liga de Jalisco. Incluso llegaron a jugar en los Estados Unidos en 1975 y 76.

T: UNIDAD MODELO, es un club respetado, nos bajaban a 6 ó 7 jugadores del primer equipo y aun así les ganábamos. Recuerda con orgullo.

De sus filas egresaron futbolistas, entre ellos sus hermanos, José Luis, “zurdo”, y Javier Pérez. Además de Marcelino Aceves, Jesús Reynoso (†), Arturo Corona, Félix Rosas, Juan A. Meza, Hugo Díaz, Luis Francisco “Guicho” García, Octavio Mora, Sabas Camarillo y Quintín Vázquez, entre otros.

E: ¿Cuál consideras tu mayor aportación?

T: Haber contribuido en la formación de cientos de personas que hoy son hombres de bien, incluso profesionistas que salieron de esta colonia popular.

“Toño” Pérez, es toda una institución en el futbol amateur mexicano, sus triunfos gracias a su capacidad de organización e interés por capacitarse lo llevó a realizar su curso de entrenadores y titularse como Director Técnico. Al dirigir sus equipos con éxito en la cancha de juego como entrenador y directivo, integró muchas veces la selección Jalisco en los Juegos Nacionales y fue nombrado por la FMF, Director de la Escuela de Entrenadores de Jalisco.

Por si fuera poco, fue parte directiva de la Asociación de Jalisco hasta llegar a la presidirla con éxito. En 1985 gana las elecciones y es nombrado Presidente del Sector Amateur y 2º Vicepresidente del Consejo Nacional de la FMF.

“Toño”, conoce el a, b, c del futbol, de su planeación directiva y deportiva, es entrenador ganador, directivo con principios que defendió siempre al futbolista llanero e impulso los campeonatos nacionales en su gestión. Fiel creyente en que hay que proporcionar herramientas a los jóvenes para su formación humana y calidad en su preparación académica y deportiva. 

Toño Pérez de izquierda a derecha, miembro del Consejo Nacional de la Femexfut 1985

E: ¿Qué sucedía en el futbol amateur mexicano en los años 70´s?


T: En los años 70´s, el futbol amateur destacó con generaciones de muchachos que fueron protagonistas de los campeonatos nacionales, donde verdaderas selecciones de los estados se preparaban y competían cada año, había Ligas de futbol en el país con buen nivel competitivo, había material de selección.


La Federación contaba con una Comisión Técnica con entrenadores nacionales comprometidos y conocedores, promovían la capacitación fue una constante, a través de la Escuela de Entrenadores llegaron a México los mejores técnicos del mundo a compartir sus conocimientos. Es decir, había estructura y siempre fue primero lo deportivo que otros intereses.

E: ¿Qué representaron las selecciones amateurs de esa década?

T: Marcaron la época dorada, fueron inspiradores, abrieron el sendero a generaciones de futbolistas del llano. El proyecto en papel se trasladó a las aulas, de ahí a la cancha.

No fue casualidad sus triunfos, las selecciones amateurs fueron ejemplo, Manzo, Cuellar, Rico, Álvarez y sus compañeros en Munich 72, le siguieron los Rangel, Caballero, Tapia, Hugo, de la Rosa, Márquez y otros que estuvieron en Centroamericanos, Panamericanos, triunfaron en Europa, además participaron en los Juegos Olímpicos de Montreal 76.

Futbolistas que refrendaron nuestra tesis de que los mexicanos somos capaces de trascender, somos ganadores, nos dimos cuenta que íbamos por buen camino.

Estas selecciones abrieron la posibilidad de que los jóvenes soñaran en superarse para llegar a vestir la camiseta nacional y representar a México en torneos internacionales. Fueron nuestra esperanza, inspiraron a miles de futbolistas mexicanos. Era motivante para el futbol amateur”. Responde “Toño”, el catedrático.

E: ¿En tu gestión federativa a qué te enfrentaste como autoridad del futbol amateur?

T: Había una piratería del profesional, no había respeto al jugador amateur, se luchó para dejar en los estatutos y reglamentos. Requisitos para registrar a un futbolista era contar con la carta de club amateur, Liga y Asociación, con ello se reconocía los Derechos de Formación y se estipulaba una cuota a los equipos de barrio o colonias.

Otro punto fue el fomento a la práctica del futbol, robusteciendo a las ligas para que sus equipos estuvieran federados, otorgando registros gratis a las asociaciones, precio módico en arbitrajes, había comisiones que daban orientación y servicio a las asociaciones, hubo comisiones que dirimían problemas entre Ligas. Los futbolistas del país se sentían parte del futbol mexicano.

Llevamos cursos, se fortalecieron campeonatos nacionales de diversas categorías incluyendo al femenil se armó la selección dirigida por Ángel Escandón fuimos a Italia.

Se dio impulso a los selectivos juveniles que participaron en Centroamericanos en 1986. Además, la generación 1987, última Selección Amateur que tuvo México, con Julio Larios al frente con su equipo de trabajo Ernesto De la Rosa, Gabriel Márquez y Héctor Larios, en un periodo corto eligen del campeonato nacional celebrado en Toluca a lo más sobresaliente del futbol juvenil, trabajan gratis durante seis meses con decenas de prospectos, participan en el Torneo del Sol y una gira a los Estados Unidos enfrentado a su similar con resultados favorables.

El saldo al final del trunco proceso fue positivo si tomamos en cuenta que 16 de los 18 integrantes debutaron ese mismo año en equipos profesionales. Entre ellos destacaba el más joven del grupo Ramón Ramírez.

E: ¿Qué sucede en la actualidad?

T: Se mercantilizó, se perdió la esencia de barrio, no hay canchas, las ligas no están federadas, cobran muy caro los registros, arbitrajes, todo es negocio, en general sus torneos carecen de buena organización y calidad. Concluyó.

Estas son algunas pinceladas de la vida deportiva de Pérez Contreras, romántico soñador que tiene mucho que compartir. Sus saberes no se compran, se caminan con determinación para hacerlos realidad. “Toño”, entrenador, maestro y directivo de pantalón largo e ideas mayúsculas, poseedor de una visión global del futbol mexicano, conoce sus raíces desde que la FIFA acreditó al futbol mexicano en 1927.

¡Se imagina usted cuánto podría aportar a las directivas del futbol actual rodeado de marketing que entienden al futbol como entretenimiento!

Héctor Antonio Pérez Contreras, su historia es ejemplo de lo que sociólogos y filósofos pretenden explicar al futbol como fenómeno social.

La huella profesional de Toño nos permite comprender como nace y reproduce la pasión de personajes Quijotescos. Su visión romántica y comprometida se fusionó con su capacidad de organización y junto con su poder de convocatoria contribuyeron al desarrollo del futbol amateur de Jalisco, su pasión y visión fueron el combustible para lograr múltiples hazañas deportivas.

Sus secretos metodológicos e invisibles radican en el entusiasmo, punto neurálgico del fenómeno social que es el futbol. Su energía no se compra, no se vende, su nobleza le permite integrar para dar identidad social a un individuo dentro de la colectividad.

El futbol es fábrica de emociones, se multiplica socialmente nos hace sentir parte de la comunidad. Es lo que llaman sentido de pertenencia, ello nos hace identificar colores y valores de un equipo, su poder penetra en la piel, se lleva en la sangre, no se olvida, es un virus que vive por siempre.

Es una conexión que logra encender los corazones, lugar donde radica la fuerza de voluntad para alcanzar nuestros más preciados sueños, por ello en el deporte no hay imposibles.

A través de un equipo, sus símbolos colores, escudo e indumentaria representan una colectividad. Es la fuerza invisible de la identidad sin ella es imposible lograr hazañas como vencer al poderoso.

Es la magia del futbol que descubrieron sus inventores ingleses el fuego para encender el espíritu combativo, guerreros modernos en el campo de juego se enfrentan en el nuevo coliseo, la cancha.

 Las funciones sociales originarias, hoy se ven extraviadas y, por momentos, recuperadas para volverse a disipar en la vorágine mercantil del mundo moderno. Explicarlo puede ser abstracto, es mejor recurrir a la memoria de sus protagonistas. Observar a detalle sus acciones cotidianas, su esfuerzo y perseverancia, sus personajes persisten, insisten una y otra vez. Tropiezan, se levantan, no se rinden hasta alcanzar la gloria deportiva y el reconocimiento de algunos cuantos.

“Toño” Pérez, una vida dedicada al futbol, por amor a la camiseta.

 

·         Museo del Futbol