¿Por fin se combate a los grupos criminales?
HORA LIBRE
Álvaro Belin Andrade
Los enfrentamientos violentos protagonizados por las fuerzas de seguridad estatal y federal contra integrantes del Cartel Jalisco Nueva Generación (CJNG) en la zona centro de Veracruz desde el pasado fin de la semana, han llamado la atención local y nacional por la virulencia con que han sido protagonizados, y por primera vez hemos visto en la entidad escenas que creíamos reservadas a los estados del norte del país, con narcobloqueos en carreteras mediante el incendio de tractocamiones y los ataques a armados contra destacamentos policiacos en Tierra Blanca y Jáltipan.
¿No existían estos grupos delictivos en Veracruz antes de la asunción del gobierno de Cuitláhuac García Jiménez?, ¿o ninguno de los anteriores gobiernos quiso enfrentarlos con determinación, engañando a los veracruzanos mediante el garlito de que mediante patrullajes inservibles, el uso de un hipotético sistema de videovigilancia que jamás operó (y en cambio sirvió para una fuerte fuga de recursos públicos) o la utilización de drones, se podría inhibir su operación?
Resulta por demás extraño que cierto sector político y de la sociedad, influido y animado por el anterior gobierno panista, hoy reclame al gobierno estatal por actuar con firmeza ante ataques de los grupos criminales que han sembrado la zozobra y el terror en el territorio veracruzano.
Pareciera que se responsabilizara a las fuerzas de seguridad pública por haber hecho su trabajo, primero, mediante la confiscación de avituallamiento armado y vehículos robados localizados en las casas de seguridad del grupo criminal y, segundo, dando respuesta de fuego a los ataques perpetrados por el cartel contra efectivos policiacos.
Las declaraciones emitidas por el gobernador Cuitláhuac García y sus secretarios de Seguridad Pública y de Gobierno, Hugo Gutiérrez Maldonado y Eric Cisneros, no dejan lugar a dudas sobre la voluntad de confrontar a los delincuentes sin lugar a negociaciones secretas y vergonzosas, como las que han ocurrido en los anteriores gobiernos, al menos desde Fidel Herrera Beltrán.
Durante esos gobiernos, pese a declaraciones y mensajes publicitarios, se dejó operar a las organizaciones criminales y, en algunos casos, se habla de complicidad entre gobernantes y cárteles criminales; pareciera que la lógica era fraguar acuerdos con uno de ellos para que combatiera a los demás, sin intervención de los cuerpos policiacos, dejando la labor de seguridad a quienes debían ser combatidos desde el gobierno estatal e, incluso, federal.
El sábado, cuando estaban a tope los ataques del cartel afectado, Cuitláhuac García dejó claro que su gobierno no será cómplice de nadie y que no se escatimarán esfuerzos en la lucha contra quienes lastiman la sociedad. Calificó a los ataques como reacciones desesperadas de los grupos delictivos por las detenciones y aseguramientos realizados por la Secretaría de Seguridad Pública y dijo que, coordinadamente con la Marina-Armada de México, el Ejército Mexicano y la Policía Federal, iba a combatir “este gran mal que administraciones pasadas dejaron crecer y solaparon bajo el manto de la corrupción e impunidad”.
Las benditas redes sociales
“Totalmente de acuerdo con lo que dijo ayer en el Senado Germán Martínez, titular del IMSS, quien habló sobre el aborto y dijo: “El IMSS no resuelve entuertos celestiales, sino terrenales y el embarazo infantil es una ‘tragedia’ que la institución debe ayudar a resolver”. Punto”. José Manuel Azpiroz @jmazpiroz
La crítica se mueve por vientos políticos
Hace apenas unos días, buena parte de quienes nos dedicamos al análisis de la realidad nos uníamos a diversos sectores políticos que reclamaban la inoperancia de los cuerpos policiacos para contener la creciente ola de homicidios y desapariciones que se acumulaban con mayor celeridad a partir, supuestamente, de diciembre.
Hoy, sin embargo, muchos críticos de la inacción gubernamental ven con malos ojos la reacción contundente de los cuerpos policiacos, que no se han amedrentado ante la capacidad de fuego de los grupos criminales; las ejecuciones y confrontaciones como la ocurrida en Tierra Blanca son una muestra que en Veracruz se está actuando contra los criminales, y es necesario que el tema de la inseguridad no se politice, pues todos los ciudadanos padecemos los índices de violencia.
El secretario de Seguridad Pública, Hugo Gutiérrez Maldonado, pidió a la población mantener la calma y destacó que fue un ataque directo contra las fuerzas del orden por las acciones de inteligencia que se han implementado para combatirlos.
¿Estamos los veracruzanos en condiciones de seguir con acciones de seguridad pública acordados con los grupos criminales como ha sucedido en los anteriores gobiernos? ¿Hubo una mejora en materia de seguridad con declaraciones de triunfalismo como las que esgrimía Miguel Ángel Yunes Linares al final de sus inoperantes reuniones de fin de semana donde solo él hablaba? El propio gobierno de Cuitláhuac, ¿acatará el mandato de combatir con toda la fuerza del estado, y el apoyo federal, a la delincuencia organizada, sin caer en la tentación de dar cifras de supuesta disminución en los índices delictivos?
Actuar contra los grupos de la delincuencia organizada va a representar reacciones de su parte. Hoy toca decidir si apoyamos esas acciones o nos arriesgamos a vivir en la indefensión mientras somos tocados por la demagogia.
Las benditas redes sociales
“Que alguien le diga al gobierno federal que el Estado no tiene facultades para “moralizar” a la población. Es una patada al Estado laico querer abrir espacios de televisión para las religiones”. Ignacio R. Morales Lechuga @irmoralesl
Las reacciones contra Silvia Alejandre, directora del Ivec
A raíz de nuestra anterior entrega de Hora Libre, en que señalamos su falta de trabajo en favor de la cultura de Veracruz y su despotismo contra trabajadores de esa institución, varios afectados han fortalecido esa convicción y han narrado sus experiencias, aunque han solicitado mantener sus nombres en el necesario sigilo.
En un primer testimonio se señala que muchos trabajadores han sido destituidos de sus puestos sin el mínimo tacto, y de las formas más intimidantes y degradantes. Silvia Alejandre es fiel practicante del nepotismo. “En mi caso por ejemplo, presté mis servicios a la institución desde 2014, cuando llegó la administración de tan esperada 4T, se presentó la actual directora con el actual jefe de contenidos para pedirme a mí y al equipo, que colaborásemos para sacar el trabajo hasta enero, mes en el cual platicaríamos de nuestra situación laboral. En enero, aun sin saber cuál era nuestro estatus, seguimos trabajando […], hasta que el jefe de departamento nos mandó a llamar fuera del horario laboral con uno de los representantes del departamento jurídico para pedirnos nuestra renuncia de manera voluntaria pues el jefe se sentía “incómodo” con nuestra actitud; tras un largo, desgastaste y humillante proceso finalizó mi relación laboral pues amenazaron con no dejarme entrar al día siguiente. Al cabo de ese proceso supimos que quienes ocupan nuestros puestos son nada más y nada menos que la esposa del jefe de contenidos y uno de sus amigos quienes además son íntimos y muy cercanos de Alejandre”.
El segundo testimonio señala que también fue intimidada por el equipo de trabajo de Silvia Alejandre: “las formas son las mismas que tanto prometió abolir la 4T, me pareció inaudito que sacó únicamente a todas las personas que entraron con la administración pasada, como un castigo que tuvimos que pagar por el simple hecho de haber entrado con el PAN, la mayoría ni siquiera ser partidarios de ningún color y más aún, siendo críticos. Curiosamente, los que tuvimos que salir, votamos por la cuarta transformación, sólo para ver regresar a muchas personas que trabajaron en el Ivec durante la administración del gobierno de Duarte. Lamenté presenciar que el tan anhelado cambio de la 4T no ocurrió”.
A la salida de los trabajadores despedidos, el jefe de departamento, Gerardo Martínez, diseñador gráfico que trabajó con Silvia Alejandre cuando fue directora de la Galería de Arte Contemporáneo, colocó a su esposa, Victoria Gastélum, en su línea directa de mando, lo que legalmente no está permitido. “Desde antes que nos fuéramos ya se sentía un ambiente laboral tenso, lleno de incertidumbre y se veía muy marcado por el trato y el miedo que Silvia infunde a sus trabajadores”.
El tercer testimonio señala: “A mí y varias compañeras, a principios de diciembre, sin siquiera preguntar nuestras funciones, qué hacíamos y cómo le hacíamos (y vaya que hacíamos “milagros”), se nos «pidió» la renuncia en promoción, es decir, si firmábamos ese día nos daban la quincena y el aguinaldo (cosas que por ley no pueden ponerse en un paquete disfrazado de buena onda). Mis compañeras, movidas por el temor firmaron, yo me negué, pues conozco mis derechos y pedí una cita con la titular. Al parecer quien sería mi nueva jefa, tenía indicaciones de no presentarse y no conocer nuestro trabajo.
“Aclaro que veníamos de una administración por demás falta de inteligencia emocional y que se vivía, previo a diciembre, un ambiente laboral muy desgastado desde la dirección, y que sólo por el compañerismo y el auténtico trabajo en equipo las cosas lograron llevarse a buenos puertos. De verdad, ingenuamente, yo pensaba que todo estaría muy bien, ya más mal no podía estar. Cuál sacudida me dio lo vida, hay formas peores. Me asombro también del regreso de tanta figura dentro del duartismo, y también el acomodo de esposas y amigos con pretextos tan bajos. Somos muchas las mujeres a las que se nos despidió haciéndonos sentir mal.
“Me sumo a lo dicho por mis compañeras, desde 2006 estoy con la izquierda de México (que es compleja, y en pañales) y me ha roto mucho el trato que se me ha dado… Esta 4T tiene que recular en muchas de sus acciones o no será, o sólo será una simulación”.
Polvo de gis
Atentan contra síndico de Soteapan… En medio de la ola de violencia que vive Veracruz, además del enfrentamiento de la policía estatal y las fuerzas federales contra uno de los cárteles más activos, el sábado sufrió un atentado en su propia casa el síndico del ayuntamiento de San Pedro Soteapan, Crisanto Bautista Cruz. Hasta su domicilio en la comunidad de Mirador Saltillo llegaron sus dos agresores, montados en una motocicleta, quienes ingresaron a su domicilio para dispararle en varias ocasiones. Para fortuna del edil, no tuvo heridas que le hubieran causado la muerte instantánea, por lo que fue trasladado a un nosocomio donde permanece grave. Crisanto ya había sido amenazado y lo había denunciado hace tiempo…
Cínico, el diputado Sergio Hernández… Quien fue el operario de Miguel Ángel Yunes Linares en el Congreso local, donde hizo pasar hasta los más torpes caprichos legislativos del choleño, hoy se quiere erigir en consejero del actual gobernador en materia de seguridad. Es urgente, dijo a la prensa el diputado panista Sergio Hernández, que el titular del poder Ejecutivo, Cuitláhuac García, reconozca que no puede solo con el tema de la seguridad y que “necesita de todas las instituciones, o la seguridad no va a mejorar”, por lo que lo llamó a sensibilizarse: “la seguridad no puede esperar, hacemos un fuerte llamado al Ejecutivo para que deje la arrogancia, y que se coordine con las instituciones y que encontremos nuestras coincidencias para construir un mejor Veracruz”. ¿Así o más payaso?…
Comentarios: belin.alvaro@gmail.com