POZA RICA, LOS TENTÁCULOS DEL PULPO REMES
Por Edgar Hernández*
@LineaCaliente
La gobernadora Nahle ha dicho que no trabajará con “personajes que tienen vinculación directa con la criminalidad”, sin embargo, tiene muy cerca al peor.
Fernando Remes, alcalde de Poza Rica impuesto por López Obrador, no solo tiene un pasado ominoso, sino que en su plaza se asienta la sede veracruzana del huachicol.
Y si al gobierno del estado ya se le olvidó a la opinión pública no, de que el pasado 5 de febrero un cargamento de casi 83 mil litros de hidrocarburo de procedencia ilícita -huachicol-, fue asegurado en un operativo conjunto sobre la carretera Poza Rica – Tuxpan, en el norte de Veracruz.
Tampoco pasa de largo que Veracruz se encuentra entre las cuatro entidades con más denuncias por robo de hidrocarburo, acumulando 3,921 casos entre 2018 y 2024 teniendo su sede justamente en Poza Rica.
El alcalde Remes es un violentador de mujeres, un abusivo de poder que cuando llegó al ayuntamiento se asignó el más alto salario superior al presidencial, que permitió el asiento de los dos Carteles más importantes y llevó a Poza Rica al más importante atraso en los últimos 20 años.
Es el mismo que fracasó a pesar del gasto millonario en la compra de voto, al pretender imponer a su sucesora.
La familia pozarricense harta le dio la espalda paradójicamente con ayuda de los operadores traidores de Morena.
Finalmente, Nahle entendió el engaño en el que cayó al permitirle tomar la decisión sucesoria al viejo ídolo, a un aprendiz de político, un ex beisbolista que se ostenta como empresario pero que su verdadera vocación ha sido la de un gánster que estuvo en la cárcel por muchos años purgando una condena por robo de autopartes.
Aun se tiene presente que el hoy alcalde fue detenido en Rancho Nuevo, Tihuatlán por la intermunicipal y al tratar de escapar fue sometido, cacheteado y amarrado de pies y manos.
Finalmente Remes pierde y hace perder a su jefa política Rocío Nahle que está que ni ella misma se aguanta por tanta engañifa y traición, por el desmesurado recurso destinado para la compra del voto mismo que fue a parar a los bolsillos de unos cuantos.
Se estima y así se ha hecho público que fueron 3 mil 500 millones de pesos los que se destinaron para consolidar la victoria Morena que nunca llegó; que hubo plazas en donde se pagaron hasta 10 mil pesos por sufragio como fue el caso de Boca del Río en donde Nahle estaba empeñada en que ganara su comadre Bertha Ahued “a como diera lugar”.
En otros municipios de las Altas Montañas se entregaron con anticipación a grupos de pobladores ocho mil pesos.
Fueron muchas las irregularidades, pero magros los resultados
Poza Rica duele por ser el enclave entre el centro y norte del estado y porque difícilmente se podrá “negociar” con el nuevo alcalde quien trae el resentimiento por haberle hecho perder a la mala las dos últimas elecciones.
Hoy en la resaca de la derrota el gobierno establecido se da cuenta que sin el Peje al mando, gobernadores y dirigentes chairos duermen con el enemigo.
Hay quien opina que solo le queda tomar venganza entre los propios de su flota, entre la chairiza, tarea punto más que imposible por el respaldo de México en donde una parte de la clase política se mantiene empeñada en hacer tropezar a Nahle, empezando por Manuel Huerta Ladrón de Guevara quien insiste en la Revocación del Mandato de la arrogante gobernadora.
Tiempo al tiempo.
*Premio Nacional de Periodismo