PROFUNDIZAR LA MILITARIZACIÓN ES DESTRUIR LA VIDA DEMOCRÁTICA
PROFUNDIZAR LA MILITARIZACIÓN ES DESTRUIR LA VIDA DEMOCRÁTICA
– El Ejército mexicano, tiene la responsabilidad de
defendernos ante amenazas externas
– Para la seguridad interior, se requiere una policía
profesional, de carácter civil
Xalapa, Ver., a 09 de agosto de 2022.– El
decreto anunciado por el Presidente que pretende incorporar la Guardia Nacional
al Ejército, representa una violación flagrante a la Constitución Política, que
aumentaría los riesgos de militarizar a México y afectar la vida democrática,
dando paso a un régimen autoritario, de imposiciones de un solo hombre y una
sola voluntad por encima de los derechos de todas y todos los mexicanos.
Desde la Dirección Estatal Ejecutiva del PRD en Veracruz,
presidida por Sergio Cadena Martínez, nos pronunciamos en contra, debido a que
con la incorporación por decreto presidencial del la Guardia Nacional al
Ejército, estaría desconociendo el mandato supremo de la Constitución Política
vigente y la afectación de los derechos y libertades de las y los mexicanos.
El Ártículo 21 de la Constitución Política dice claramente que
“las instituciones de seguridad pública, incluyendo la Guardia Nacional, serán
de carácter civil”. Este texto constitucional fue aprobado por el poder
legislativo federal en 2019, durante el gobierno de presidente López Obrador
que ahora pretende cambiarlo.
El Presidente tiene la facultad constitucional de decretar los
actos de gobierno que sean necesarios, pero no en aquellas acciones que
quebranten el mandato de la Constitución Política.
La percepción personal de AMLO ha cambiado y ha recurrido a
las fuerzas armadas nacionales del país, para atender múltiples tareas de gobierno
civil como la construcción de un aeropuerto, el control de las aduanas y el
acompañamiento del combate a la delincuencia.
El Ejercito mexicano tiene importantes tareas como la
sobreguarda de la soberania y la atención de la seguridad nacional, lo que
sería altamente riesgoso que ante los fracasos y malos resultados del gobierno
federal, el Presidente pronto considere por decreto, responsabilizar al
ejército mexicano de tareas básicas como la educación pública o la organización
de las elecciones.
El Presidente ha decidido una ruta que desconoce la
Constitución política y que sin lugar a dudas se impugnará ante la Suprema
Corte de Justicia de la Nación.
Nada y nadie por encima de la Constitución y los derechos del
pueblo de México.