¡QUE GANE MÉXICO!
Arquidiócesis de Xalapa
¡QUE GANE MÉXICO!
Este
6 de junio de 2021 seremos protagonistas de las elecciones más importantes de
la historia de nuestro país. Somos
responsables de elegir a nuestras autoridades y a nuestros legisladores y con ello el rumbo de nuestro país. Hemos
tenido tiempo para CONOCER las
diferentes propuestas políticas y DISCERNIR el sentido de nuestro voto. Este día 6 de junio nos toca VOTAR.
Después
de las elecciones y una vez que el árbitro electoral nos dé a conocer los resultados, empezará otra etapa muy importante que será la de la OBSERVAR Y EXIGIR a nuestras autoridades que lleven a cabo lo que
anunciaron en campaña. El despertar
ciudadano y el interés en la democracia que se ha logrado en este proceso electoral no termina con las votaciones, continuará ahora con otras formas de participación. La nueva gobernanza hoy se
hace de la mano de los ciudadanos. México le
pertenece a todos, por eso cada uno debe contribuir de la mejor manera para que
las cosas sucedan.
Con
nuestro voto expresamos nuestro amor a la Patria y nuestro compromiso para colaborar en una mejor sociedad. Muchos mexicanos, antes que nosotros, fueron aportando mucho de lo
que hoy somos; nuestra democracia cuenta con instituciones serias que
se han ido construyendo poco a poco a lo largo de muchos años; no obstante que tienen sus límites, son
instituciones que han dado certidumbre y han permitido transitar de forma pacífica. Con nuestro voto manifestamos
además nuestras convicciones, valores y las expectativas del país que deseamos y queremos construir.
Es
de suma importancia ir a votar con madurez cívica, en forma responsable, en un clima de respeto, paz y conciencia
ciudadana. Las elecciones se ganan con votos y por eso este 6 de junio todos debemos ir a votar.
Existe
una gran deuda social entre los ciudadanos y entre sus anhelos más urgentes está la seguridad, la salud, la economía y
la educación. Hace falta poner un alto a los secuestros, las extorsiones, los homicidios y las desapariciones forzadas y las arbitrariedades. En el caso de la educación urge la
formación en valores y que los jóvenes
tengan espacios y medios para estudiar, trabajar y convivir sanamente con los demás.
Se requiere de un mayor compromiso con los trabajadores, los campesinos y los indígenas;
se necesita ofrecer oportunidades y condiciones para que la vida de todos cuenta con mejores niveles en vivienda, trabajo, alimento, seguridad, justicia y ambientes sanos de paz y armonía.
Nuestra
sociedad requiere de legisladores comprometidos para proteger la vida de todo ser humano, desde su concepción hasta su
muerte natural; es necesario proteger al que está por nacer, como al adulto mayor,
a los niños y adolescentes maltratados, explotados o abusados; se necesitan leyes que garanticen los genuinos derechos de las mujeres, de los
estudiantes, de los campesinos y de los migrantes. Se necesita reconocer que somos un país plural, con
una gran diversidad de valores y que debemos trabajar por la unidad y la concordia en medio de la diversidad.
En
estos comicios todos estamos involucrados: los ciudadanos, los candidatos, los partidos políticos, los órganos electorales y los medios de comunicación. Cada uno debe aportar lo mejor de sí y su
responsabilidad de saber respetar los resultados y colaborar con quienes resulten electos.
Nos
auguramos que la participación en esta jornada electoral sea abundante y que todos ejerzamos este derecho y obligación
de votar. El voto es personal, libre, razonado y secreto. Votar es un derecho, una obligación y un deber moral de todo ciudadano.
El
voto no se compra ni se vende: es absolutamente condenable que se consiga a través de sobornos o amenazas. Todo lo que
constituya una forma fraudulenta de obtener
el voto, es un delito deshonesto y constituye una falta moral grave, pues se manipula a la persona, hiriendo su
dignidad, tanto más cuando se especula con la pobreza o la ignorancia de la gente sencilla.
Si todos buscamos el
bien común y cumplimos con nuestro deber de ir a votar, todo México ganará.
Esperamos que esta jornada electoral se viva en un ambiente transparente y ordenado, acompañado de una fuerte participación.