RED DE NEPOTISMO EN EL PODER JUDICIAL, JUEZ ACUMULÓ FAMILIARES DURANTE AÑOS
RED DE NEPOTISMO EN EL PODER JUDICIAL, JUEZ ACUMULÓ FAMILIARES DURANTE AÑOS
Ciudad
de México, 21 de mayo de 2025.- De acuerdo a documentos oficiales y
registros públicos disponibles en la plataforma “Conóceles” del Instituto
Nacional Electoral (INE) revelan un posible caso de nepotismo dentro del
Poder Judicial de la Federación, vinculado al juez Yamin Francisco
González Mendoza, quien durante más de tres años estuvo adscrito como Juez
Octavo de Distrito en el Estado de Sonora, entidad en la que tenía a la gran
mayoría de sus familiares laborando también dentro del sistema judicial.
González
Mendoza, actualmente Juez Décimo Quinto de Distrito en la Ciudad de México
(adscrito desde el 16 de agosto de 2021, durante el llamado “Zaldívarato”), ocupó
el cargo en Sonora del 16 de abril de 2018 al 15 de agosto de 2021, periodo
en el cual al menos ocho de sus familiares cercanos formaban parte
activa de distintos órganos jurisdiccionales, algunos incluso en la misma plaza
o circuito judicial.
Según
el Padrón Electrónico de Relaciones Familiares, sus familiares:
- Alejandra
Yunuén Silva Farías,
esposa, secretaria de Tribunal en un colegiado del Primer Circuito.
- Francisco
Adolfo Calleros Mendoza,
primo hermano, Actuario Judicial en Naucalpan.
- José
Artemio Zúñiga Mendoza,
primo hermano, Juez de Distrito y excandidato a magistrado.
- Melva
Idalia Priego Jiménez,
esposa de su primo, secretaria de Tribunal en materia laboral.
- José
Lamberto Zazueta Gregg,
sobrino (hijo de su primo), oficial judicial en la CDMX.
- María
Gregg Díaz, tía,
secretaria en el mismo Juzgado Octavo de Distrito en Ciudad Obregón cuando
él fue juez titular.
- Óscar
Díaz Soto y María
Magdalena Díaz Soto, ambos tíos (primos de su madre o padre), también
ocupaban cargos como secretarios de juzgado en Nogales, Sonora.
- Abraham
Rincón Olmos,
cuñado, fue oficial administrativo en Tijuana.
Varios
de estos nombres se cruzan con la adscripción y trayectoria de González
Mendoza. Por ejemplo, su tía María Gregg Díaz fue secretaria de juzgado en
la misma unidad donde él fue titular, una situación que compromete los
principios de imparcialidad, ética y transparencia que exige el Poder
Judicial.
Aunque
algunos de sus familiares ya no están activos —al haber renunciado o jubilado
recientemente—, la mayoría estuvieron empleados durante el periodo en que el
juez operó en Sonora.
La
revelación de esta estructura familiar en órganos judiciales federales,
en su mayoría en el mismo estado o circuito, revive los cuestionamientos sobre
el control interno, la falta de vigilancia y los vacíos institucionales que
permiten la reproducción del nepotismo.
Hasta
el momento, ni el Consejo de la Judicatura Federal (CJF) ni el propio
juez González Mendoza han emitido alguna postura pública sobre esta posible red
de influencias.
Organizaciones
como México Evalúa y TOJIL, que han documentado casos similares
en el pasado, han señalado la urgencia de reforzar las políticas contra el
nepotismo estructural en el Poder Judicial. «No es solo un asunto de
relaciones personales, es una cuestión de credibilidad institucional», han
advertido.