¿Revocación?
¿Revocación?
Por Pedro
Peñaloza
“A mí dadme lo superfluo,
que lo necesario todo el mundo puede tenerlo”.
Oscar Wilde
Después de la “guerrita” que escenificaron los
bloques parlamentarios en la Comisión Permanente del Congreso de la Unión, para
definir la pertinencia de convocar a un periodo extraordinario del poder
legislativo y, así discutir el reglamento de la revocación de mandato, cuyo
resultado fue adverso a los deseos del inquilino de Palacio Nacional, se coloca
ahora como punto central (para Morena y sus aliados), dicho tema para su
discusión nuevamente en la Cámara de Diputados.
Como se sabe, la Constitución establece en su
artículo 35 los lineamientos para darle basamento legal a la consulta ciudadana
en cuestión. Sin embargo, hay una pregunta central: ¿quiénes van a solicitar la
revocación del mandato del presidente de la república?
Ahora bien, para que el Instituto Nacional
Electoral (INE) convoque a este ejercicio, se requiere que al menos 2.8
millones de ciudadanos soliciten clara y explícitamente la destitución del
titular del poder ejecutivo federal. Dichas personas tendrán que señalar, en
detalle, que el presidente no ha cumplido con sus obligaciones inherentes al
cargo y, en consecuencia, exigen su remoción. Por lo tanto, al menos que estemos
en el mundo al revés, es inimaginable que Morena y las expresiones oficialistas
sean animadoras e impulsoras de la recolección de firmas para promover el
despido de López Obrador.
Para evitar confusiones y desplantes demagógicos,
se debe ser muy preciso en el significado de las palabras. Estamos hablando de
revocación. No queremos ratificar. No es éste un ejercicio para satisfacer
vanidades personales. Una vez que se cumpla el requisito formal numérico,
descrito líneas arriba, el INE tomará en cuenta el dispositivo reglamentario
que haya aprobado la Cámara de Diputados y organizará la consulta. El paso
definitivo para sustituir al presidente será que voten al menos 37 millones de
ciudadanos (40% de la lista de los electores nacionales).
Sin embargo, por si algo faltara, en días recientes
López Obrador ha declarado que la solicitud presupuestal del INE, para la
realización de la jornada de revocación, es “muchísimo” y que lo que debe
hacerse para disminuir el gasto es, afirmó el tabasqueño, que los funcionarios
del propio INE, “que ganan más de 100 mil pesos, aporten la mitad y [los que
reciban] de 10 mil a 100 mil, el 25%”. Además, que “se pida apoyo a los
gobiernos estatales, a los municipales, a las organizaciones y a todos los
ciudadanos”. Es decir, una actividad institucional que debe sufragarse con
gasto público ahora se realizará por “coperacha”. Sí, la locura no tiene
límites. Y lo que falta todavía.
pedropenaloza@yahoo.com/Twitter: @pedro_penaloz