Cortos DeportivosDEPORTES

ROGELIO CARMONA PELOTERO DE CORAZÓN

Comparte

“El Roca”
Mañana de beisbol, recuerdos y anécdotas hicieron de la mañana una lección de esfuerzo, dedicación de un hombre que se forjó gracias al beisbol.
Rogelio Carmona nació en 1942, en San Marcos de León, huérfano de padre tuvo que buscar trabajo desde pequeño, “la ausencia de mi padre nos dejó sin una persona que nos guiara, nos orientara, fue mi abuela quien nos sacó adelante a siete hermanos huérfanos, una madre apesadumbrada que al quedar viuda nos abandonó. La abuela nos crio, ella nos levantó. A pesar de todo no fui de mala cabeza, gracias a Dios”. Nos cuenta el famoso Rogelio Carmona, mejor conocido como “El Roca”.
Todo empezó un día en que el señor Emilio Mestizo, le regaló una pelota de hilo, ahí inició el romance con el beisbol. “Jugaba con mi hermano, con los amigos en la calle y en la escuela hasta que un día Panchito Galván Rivera, hizo una selección escolar para jugar contra escuelas de Coatepec y Xalapa”.
Continúo jugando y gracias a sus mentores aprendió más del juego. “Gracias a ellos aprendí la disciplina, a cuidarme, a entrenar no anduve de vago, gracias al beisbol”.
Fue el señor Mestizo quien me ayudó a ingresar a la fábrica de San Bruno, a sus diecinueve años destacó como cátcher y se enroló con los diplomáticos de Tepic, en su primera temporada casi no jugó. “Eloy Gutiérrez, era el titular, un gran pelotero”, comenta “El Roca”, para continuar relatando su travesía por las plazas de beisboleras del país en busca de una oportunidad en la liga mexicana.
Posteriormente, se fue a jugar a Arriaga, Chiapas a una Liga Cafetalera al final de la temporada regresaba a San Bruno, jugó en la segunda fuerza de Xalapa. Ahí Américo Pérez, el cubano lo firma para Los Tigres de México, “los novatos éramos más de quinientos, nos enviaban equipos sucursales a mí me enviaron a Tabasco, jugamos en Macuspana, Ciudad Pemex, Las Choapas, Agua Dulce, entre otros poblados en la Liga Petrolera que manejaba otro cubano Cuco Toledo que les decía: “no dejes de ver la pelota, no la puedes perder de vista”.
Al fin de la temporada, lo envían al campamento de Tigres en Pastejé, ahí conoció a compañeros que igual que él soñaban con brillar en el diamante. Finalmente, se queda en el equipo y lo envía a Caborca, Sonora donde son campeones en una temporada redonda.
Una nueva temporada y nuevamente a trabajar en San Bruno, para ir ahora a Ensenada, Baja California. Al término del campeonato fue seleccionado para hacer una gira de un mes a las islas de Baja California. “Una experiencia inolvidable, conocí lugares hermosos y una comida deliciosa que me deslumbró”. Cuando mejor jugaba y estaba cerca de ingresar al primer equipo de Los Tigres una lesión en el brazo derecho le impide continuar en el beisbol cuando todos auguraban un futuro prometedor.
Su primer contrato fue de 5 mil pesos con sus ahorros construyó su casa, “es mi orgullo, desgraciadamente me lastimé, me hubiera gustado jugar en la liga mexicana y ganar un poco más”, remata.
Rogelio “La Roca”, platicó con el director Rubén Monzón y Chava Martínez, largo y tendido. El que fuera cátcher y cuarto bat recordaban cuando volaban la pelota fuera del parque Colón en Las Puentes y otros campos de la región con toletazos de vuelta completa.
“La Roca”, testigo de la pasión por el beisbol en Veracruz. Equipos, peloteros, y jugadas vuelven a revivirse a los equipos de la región, como el equipo Anáhuac y la Nestlé en Coatepec, en aquellos tiempos llegaron a jugar el “Zurdo” Ortiz, como no recordar las curvas que distinguieron a su hermano Pavo Carmona, dijo Rubén Monzón. También Chava Martínez, dio cuenta del home run que le pegó al pitcher “Pototo” Valdés. A peloteros de la talla del Güero Pitaya, Toño López, Guicho López, Héctor Cano “Cocoliso”, Francisco “Chico” García, Porfirio Ruiz, que jugó en el Águila de Veracruz de la Liga Mexicana, Adolfo Ramírez “Dominic”, su mejor manager “Cuco” Toledo, me decía: “Come, duerme, sueña y piensa en beisbol”.
El gusanito por el beisbol lo llevó a integrar representativo de la categoría 60 y más obtuvo el 2° lugar en Aguascalientes y el campeonato en la CDMX además de otros subcampeonato en Ciudad Juárez.
Chava Martínez, interviene en la plática y dice: “yo lo admiro desde niño, por ser buen deportista, gran cátcher y jonronero y mejor persona. Nunca lo he visto mal, tomando o en malos pasos”.
Platicar con “El Roca”, hicieron alegre el día, porque el beisbol nunca muere y los recuerdos de aquellos que viven y sienten el rey de los deportes viven por siempre.
Nos despedimos, “estoy agradecido con el deporte, por todo lo que me dio el béisbol no lo cambio por nada”.
Rogelio Carmona “El Roca”, Orgullo de Veracruz