SE DAN ¡CON TODO!
SE DAN ¡CON TODO!
Manuel
Alejandro Álvarez Torres
Agencia
Reforma
Ciudad
de México 29 abril 2024.- Desde el primer minuto iniciaron los ataques.
Xóchitl
Gálvez (PANPRI-PRD) y Claudia Sheinbaum (Morena-PTPVEM) protagonizaron anoche un
acalorado debate donde se atacaron con todo hasta decirse
«narcocandidata» o «corrupta».
El
segundo debate presidencial, con un formato ligeramente más flexible para el
intercambio entre candidatos, fue aprovechado por la aspirante Presidencial
opositora Xóchitl Gálvez para conectar 36 señalamientos o acusaciones en contra
de Claudia Sheinbaum y el gobierno del Presidente Andrés Manuel López Obrador.
Sheinbaum
también atacó desde el inicio aunque trató de moderar sus respuestas.
En la
segunda hora del debate entró al intercambio de descalificaciones hasta sumar
18 contra su rival y contra los partidos de la coalición que abandera.
Desde
el arranque, la panista Gálvez soltó: «los delincuentes ya tienen partido.
Morena se ha convertido en un narcopartido».
La
candidata de Morena-PT-PVEM respondió: «el único narcogobierno que ha
existido declarado es el de Felipe Calderón, del PAN».
Durante
las casi dos horas de debate, Xóchitl Gálvez aprovechó prácticamente todas sus
intervenciones para llamar a Sheinbaum la candidata «de las mentiras»
y luego combinar distintos epítetos como «candidata del combustóleo»
y acusarla de usar 400 millones de pesos del erario para promover su imagen y
cuestionarle si estaría dispuesta a investigar a los hijos del Presidente o a
la aspirante morenista en Veracruz, Rocío Nahle.
Pegó
duro cuando le dijo: «Se te cayó la Línea 12, el Rébsamen y el Suburbano
Se te va a caer el País».
Incluso,
a pesar de que habían pactado no exhibir pancartas mientras intervenía un
adversario, cuando hablaba la morenista, Gálvez mostraba pancartas con la
leyenda «Claudia miente» o hacía señas de que todo lo dicho por la
morenista era palabrería.
Exhibió
en cámaras un dibujo con la silueta de Sheinbaum y una nariz de Pinocho.
En su
oportunidad, la morenista acusó a la hidalguense de dar contratos ilegales
cuando fue Jefa Delegacional en la Miguel Hidalgo y que cuando fue titular de
la Comisión Nacional de Pueblos Indígenas, la empresa de la que es dueña obtuvo
17 contratos millonarios.
Le
echó en cara que no haya condenado la represión en contra de los campesinos de
San Salvador Atenco, cuando se opusieron a la construcción del aeropuerto en
Texcoco; y le cuestionó querer energías limpias para hacer negocios sucios.
Gálvez
no se dejó. Replicó que las contrataciones privadas que obtuvo fueron legales,
y remató con una foto del ex esposo de la Jefa de Gobierno, Carlos Imaz,
recibiendo dinero. «Eso sí es un delito, los míos son contratos
legales», reviró Xóchitl.
Para
entonces, los disparos de la candidata de Oposición se multiplicaban al grado
de retar a la morenista a tomar agua de Iztapalapa que traía en un frasco, y la
acusó de robarse una casa en Tlalpan.
«La
única corrupta aquí es la candidata del PRIAN», soltó Sheinbaum y anunció
que en lo que restara del debate la llamaría así.
En la
segunda mitad del encuentro, la morenista aseguró que Xóchitl había avalado
minas a cielo abierto y la señaló de pertenecer a la «priandilla
inmobiliaria», en relación a las acusaciones en contra del llamado
«Cártel Inmobiliario» de la Alcaldía Miguel Hidalgo.
Al
final, ambas candidatas celebraron con sus simpatizantes en actos por separado
y se declararon ganadoras.
El
emecista Jorge Álvarez Máynez no entró al juego de las acusaciones y formuló
propuestas sobre los temas pactados.