Susana Herrera Lazarini
Sin tacto
Por Sergio González Levet
Miguel Reneaum puso en palabras lo que todos sentíamos en el corazón: “¡No, no! ¡No es posible! Díganme que es un sueño terrible. Que no es verdad.” La noticia de la muerte repentina, impredecible, infausta de Susana Herrera Lazarini corrió ayer inhóspita entre los colegas de Veracruz y de Xalapa.
Susy estaba de vacaciones en Costa Esmeralda. Había ido a comer a Casitas y regresaba en un taxi a su hotel, cuando un accidente carretero y la sinrazón de un chofer de tráiler se llevaron para siempre a la gran reportera, una colega que todos queríamos por su trato amable, por su bondadosa sonrisa y su mirada franca.
Yo la recuerdo como una compañera de trabajo cumplida y profesional, eficiente y seria, que hacía factible la información del sector turístico de Veracruz, como Enlace de Comunicación de la entonces Secretaría de Turismo, Cinematografía y Cultura.
Desde la Coordinación de Comunicación Social del Gobierno del Estado teníamos la certeza plena de que con Susana Herrera Lazarini siempre se contaba. Estaba al pendiente de la información, proporcionaba el dato exacto que se requería, tenía o encontraba los contactos y las relaciones necesarios. Los comunicados de Turismo no eran problema porque estaban garantizados por la preparación y el talento de Susy.
Harry Grappa, el titular, podía descansar en esa parte de la Secretaría porque siempre tuvo plena confianza en su jefa de prensa.
Pero ésa fue apenas una parte de su carrera como periodista, porque de lo que más hay que hablar es del trabajo informativo que desarrolló en Radio y Televisión de Veracruz, que hoy luce un crespón en sus emisiones del Canal Más, en señal del luto y la pena por la partida de quien era Jefa de Información en la oficina del Puerto de Veracruz.
Con ese infame vuelco del destino, termina una carrera que inició venturosamente en la Facultad de Ciencias y Técnicas de la Comunicación de la UV, donde se le recuerda afectuosamente y que también está de luto por su hija perdida.
Susana Herrera tenía mucho por dar como periodista. Su carrera había entrado en una gran madurez y se proyectaba como una de las mejores reporteras de televisión. Cuántas notas, cuántos reportajes se quedarán para siempre esperando su visión aguda, su enfoque personal, su punto de vista.
Pierden también los compañeros reporteros de RTV a una gran maestra, porque ella era pródiga en compartir sus experiencias, en orientar y preparar a los que empezaban su carrera en este valle de lágrimas que es el periodismo.
Se ha ido físicamente Susana Herrera, Susy para sus amigos. Nos queda sin embargo su obra personal, todo lo que alcanzó a comunicar en su carrera de periodista honesta y cabal, que fue mucho e importante.
Y nos queda perenne el recuerdo de esta gran amiga que siempre tenía un gesto afectuoso y la mejor de las intenciones… porque la bondad era su divisa.
Descansa en paz.