TLALNELHUAYOCAN, ALCALDESA TRAMPOSA
TLALNELHUAYOCAN, ALCALDESA TRAMPOSA
Línea Caliente
Por Edgar Hernández
Empeñada
en apantallar a otro igual que ella, al gobernador Cuitláhuac García, y
convencida de que todos los sus gobernados son unos tontos, la alcaldesa de San
Andrés Tlalnelhuayocan, Fanny Alejandra Muñoz Alfonso, dedica sus mejores
esfuerzos a plagiar de internet planes y proyectos municipales convencida de
que nadie se dará cuenta.
Su última
barbaridad, en compañía de su iletrado cabildo, fue imponer multas hasta de un
millón de pesos en contra de quien impida que su municipio “inspeccione
aeropuertos, estadios, torres de radio y televisión y el Centro de Convenciones
de Boca del Río”.
La
Dirección Municipal de Protección Civil del municipio que gobierna, de acuerdo
a su nuevo reglamento, tiene atribuciones para inspeccionar, auditar,
intervenir, vigilar “terminales de ferrocarriles, de transporte de carga, de
pasajeros urbanos y foráneos, casinos, centros nocturnos, discotecas, bares,
cantinas y salones de baile.
Ni
la Guardia Nacional tiene tantas atribuciones y la Secretaría de Gobernación ya
le pidió asesoría a Fanny.
La
pifia de la ex panista hija del cacique de la región y hoy arrojada morenista,
se origina al momento en que se encomienda al genio Alfonso Eduardo Magallán
Amores, Contralor Interno Municipal elaborar un reglamento municipal interno.
Y
más tarde que perezoso a este brillante chairo se le hizo fácil copiar de
internet el reglamento municipal de Madrid, mismo que complementó con el de
Nueva York y… ¡Listo!
El
flamante mandato sería validado por José Román Clemente Soto, Secretario del
Ayuntamiento, por Félix Hernández Hernández, síndico y por Delfina Iturralde
Sánchez, regidora única.
Nadie
se ocupó en leer que en lo sucesivo Tlalnelhuayocan tendría bajo su responsabilidad
cinemas, teatros, estadios, parques, plazas, centros de convenciones, clubes
sociales, deportivos balnearios, museos, galerías de arte, centros de
exposición, salas de conferencias y bibliotecas; y parques, plazas, así como
todo tipo de sitios de espectáculos públicos como Arenas, el estadio azteca y
la abandonada plaza de toros “México”.
Un
clic bastó para llenarse de atribuciones que ni Obama tuvo bajo su mandato.
Vaya
hasta trascendió que Tlalnelhuayocan sería responsable de la vigilancia y
aplicación de multas severas a quien ose atentar contra la Estatua de la
Libertad que López Obrador pretende echar abajo.
Se
sabe además que en este municipio conformado por 48 localidades en las cuales
habitan 14 mil personas, fiel a San Andrés Apóstol, en breve emitirá un bando
para impedir que se siga utilizando el Monumento a la Independencia como sitio
de protesta popular.
Y la
Fuente de Trevi, de Roma será en breve sujeta a una seria limpieza retirando
todas las mugrosas monedas que arrojan parejas románticas para establecer
alcancías en donde solo se permitan euros.
Todo
un cambio de paradigmas en materia reglamentaria puso en marcha Fanny, quien
apenas cursó la primaria pero con una gran visión de estado determinó que bajo
su mandato tendrá bajo su potestad la revisión de edificios departamentales o
cualquier otro inmueble destinado a casa habitación.
No
descuida, desde luego, mantener a raya internados, asilos, conventos,
fraternidades, hoteles, moteles, campamentos turísticos, centros vacacionales y
supermercados.
Y
como esta audaz mujer, candidata al Premio Nobel del Ingenio, no es nada envidiosa
ya dijo que “brindará apoyo a diferentes dependencias y entidades de otros
municipios estatales y federales –pronto lo hará a nivel internacional vía ONU-
en tareas de salvamento y auxilio a la población.
Toda
una joya esa Fanny.
Y
ojo, ya por lo pronto el municipio de Banderilla, en remedo de Tlalnelhuayocan,
ya cuenta con un reglamento similar.
Tiempo
al tiempo.
*Premio Nacional de Periodismo