Tóquenle las golondrinas al Auditor
Tóquenle las golondrinas al Auditor
· No va a durar en el cargo, luego de la “sugerencia”
que lo investiguen
· El presidente de la república lo acusó de una
actitud de «politiquería»
· En Veracruz, el ORFIS no ha entregado su informe
Por
Miguel Angel Cristiani Gonzalez
Podríamos apostar a que en fecha
próxima, el todavía hasta el día de hoy, Auditor Superior de la Federación,
David Colmenares si no es removido de su cargo, habrá de presentar -como ya lo
han hecho muchos otros en el gabinete del presidente Andrés Manuel López
Obrador- su renuncia irrevocable.
Y es que si no renunció ya es porque
en la ley no figura como una dependencia del Ejecutivo Federal, sino que es
parte del Poder Legislativo.
Pero luego de que el mismísimo
presidente de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), anunció que enviará
una carta a la presidenta de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, Dulce
María Sauri, para que se inicie una investigación a la Auditoría Superior de la
Federación (ASF), sobre el reporte de la cancelación del aeropuerto de Texcoco
y calificó la actuación de la entidad fiscalizadora como una actitud
‘politiquera’.
“No creo que hayan hecho mal las
cuentas, aun así, sería lamentable que la Auditoria hiciera mal las cuentas,
más bien creo que se trata de una actitud politiquera de que buscaron dañarnos
para complacer a nuestros opositores”, sentenció López Obrador en su
conferencia de prensa matutina desde Palacio Nacional.
De nuevo, una vez más, el mandatario
mexicano ante un tema crítico a su gobierno, ahora acusó que el informe de la
ASF fue aprovechado “por la oposición conservadora y por la prensa que defiende
al antiguo régimen corrupto para tratar de dañar la imagen” del gobierno de la
4T.
López Obrador aseveró que la
cancelación del aeropuerto de Texcoco tuvo un costo de 110 mil 807 millones de
pesos, lo que es una tercera parte menos de lo publicado por la Auditoria
Superior de la Federación.
El futuro cercano del Auditor
Superior, David Colmenares aparece como una carrera de obstáculos, de la que no
podrá salir ganador. Hay que recordar que en octubre próximo, la ASF entregará
la primera tanda de resultados sobre la revisión de la cuenta pública de 2020,
segundo año de López Obrador.
Pero todo parece indicar que al
Auditor Superior de la Federación, David Colmenares que apenas había tomado
posesión en el 2018 y le tocó entregar los resultados del informe de las
auditorías al gobierno en el 2019, no llegará a entregar los del segundo año de
la administración de la Cuatro T.
Por todo lo anterior, es que acá en
el terruño veracruzano, la Auditora General del Estado en el Órgano de
Fiscalización Superior el famoso ORFIS, la maestra Delia González Cobos, esta
es la bendita hora, que no ha podido o querido, entregar los resultados de las
auditorías a las dependencias estatales y municipales del 2019, que ya se le ha
venido cumpliendo el plazo para entregarlas, pero se le ha tenido que
prorrogar.
No hay nada actualizado en la página
del ORFIS, como si no hubieran hecho nada en los últimos dos años, de no ser
celebrar todos los días, de la mujer, de los pueblos indígenas y hasta el de la
bandera, pero del trabajo de fiscalización no hay nada. Vaya los comunicados de
actividades son más de celebraciones y festejos que de trabajados de
auditorías.
Ya hasta pareciera que no es el
Órgano de Fiscalización del Estado, sino el departamento de Acción Social del
Gobierno del Estado, encargado de llevar la agenda de días festivos.
Sería bueno que el Instituto
Veracruzano de Acceso a la Información, se diera una vueltecita -aunque sea de
manera virtual por la pandemia, para checar toda la información, que pareciera
se quedó congelada hasta el año 2019.
En ese vivir en el pasado, hasta se
publica todavía el llamado “Plan Maestro 2012-2019. Compromisos cumplidos” en
el que se informa que “En septiembre de 2012, al participar en el proceso de
selección de auditor general del Órgano de Fiscalización Superior (ORFIS), el
C.P.C. Lorenzo Antonio Portilla Vásquez expuso ante la Comisión Permanente de
Vigilancia de la Sexagésima Segunda Legislatura del H. Congreso del Estado, una
visión de trabajo que, a partir de los resultados de la fiscalización superior,
incorporaba acciones preventivas y de mejora de los entes fiscalizables.
En apego a los conceptos que señalan
que el control posterior, en este caso la revisión de las cuentas públicas, no
es un fin en sí mismo sino un medio para conocer las fortalezas y debilidades
de las instituciones gubernamentales, Portilla Vásquez presentó a la Cámara de
Diputados un planteamiento en el que más allá de las labores de auditoría, el
ORFIS aprovechara la valiosa información que generaba o recibía como materia
prima para convertirse en una instancia de apoyo al mejoramiento del quehacer
gubernamental estatal y municipal.”
Pero viendo cómo le va al mismísimo
Auditor Superior de la Federación, David Colmenares a quien todo parece indicar
que tiene los días, si no es que las horas, contadas para seguir en ese cargo,
por eso es que acá en el terruño jarocho, se aplica la máxima de que “cuando
veas las barbas de tu vecino cortar…pon las tuyas a remojar”