TU DECISIÓN DEBE RESPETARSE
TU DECISIÓN DEBE RESPETARSE
El pasado 15 de marzo de 2022, la Conferencia del
Episcopado Mexicano (CEM) se
pronunció sobre la consulta ciudadana de la revocación de mandato del presidente de México a la que ha
convocado y organizará el INE, el próximo 10 de abril de 2022.
En la consulta se hará esta pregunta: “¿Estás de acuerdo en que a Andrés Manuel López Obrador, Presidente de los
Estados Unidos Mexicanos, se le revoque
el mandato por pérdida de la confianza o siga en la Presidencia de la República hasta que termine su periodo?”.
De acuerdo a la Constitución, en nuestro país, los periodos presidenciales son de 6 años. Conforme a ese principio constitucional el gobierno actual deberá culminar su gestión en 2024.
En el mensaje difundido por los obispos mexicanos, dirigido a todos los miembros de la Iglesia católica en México
y a todas las personas de buena voluntad, en su parte esencial refiere lo siguiente:
“Les invitamos a discernir
en un ambiente de oración, delante de Dios, para
que cada uno decida si ha de participar o no, y en caso de hacerlo, en qué
sentido deberá emitir su voto. “Se trata de una decisión de una gran responsabilidad. Busquemos todos lo que más le conviene a México.”
Por lo tanto, ante este ejercicio ciudadano al que se está
convocando para el próximo 10 de abril, lo primero que debemos hacer todos es un BUEN DISCERNIMIENTO. Dado que no se trata de una elección de alguna de nuestras
autoridades o de algún representante popular, donde votar es un derecho y obligación ciudadana, sino de un
ejercicio democrático donde votar o no
votar tiene prácticamente un mismo valor, entonces nadie debe sentirse obligado a asistir y mucho menos si está siendo presionado,
chantajeado, engañado o manipulado.
Se sabe por ejemplo que en algunos ambientes se han estado
condicionando algunos programas
sociales. Algunas personas se están quejando de que en forma amenazante en algunas oficinas públicas se les presiona para que apoyen y voten en el sentido de la dispendiosa y escandalosa campaña publicitaria que ha tapizado todo el territorio mexicano. Los vicios que
tanto se criticaron en el pasado, siguen haciéndose presentes ahora y ofenden la sensibilidad de los ciudadanos.
En este discernimiento es importante tener presente qué es
lo que conviene al país de ahí que
todos los mexicanos que tienen una identificación actualizada del INE, delante de su conciencia deben decidir si participar o no y si lo hacen,
qué sentido le darán a su voto. Este ejercicio democrático
se mantiene en el ámbito de lo personal y no
obliga moralmente a nadie.
La Iglesia, en estas tres últimas décadas, ha acompañado a
sus feligreses con el discernimiento. Ofrecemos en seguida algunos aspectos, basados en documentos que nuestros obispos han manifestado en otras ocasiones de ejercicios democráticos:
– La esencia de la democracia es la búsqueda del bien común.
– Un régimen auténticamente democrático no basa
su autoridad en la fuerza y en el
temor recíproco entre él y los ciudadanos. No es un buen signo la amenaza, la descalificación, ni ningún tipo de chantaje.
– El poder político corre siempre el riesgo de
absolutizarse, desligándose de la
voluntad soberana del pueblo para buscar sólo el interés de una persona, de un grupo o de un partido.
– Los partidos representan un proyecto parcial,
temporal y transitorio, en el que hay cosas
buenas y malas.
– Los cristianos debemos tener hacia ellos una adhesión crítica. Absolutizar a un
partido es caer en una especie de idolatría.
– Sentimos la necesidad de propiciar relaciones
fundadas sobre la verdad pues somos conscientes de que la mentira, el engaño, las dobles intenciones y la simulación empañan
nuestro diario vivir y socavan la paz y el progreso de México.
– Debemos trabajar en la formación cristiana de la conciencia y rescatar los valores perdidos de la moral
evangélica, particularmente el respeto a la
vida en todas sus etapas, la libertad fundada en la verdad y el aprecio a la
dignidad de la persona.
– Experimentamos la necesidad de promover la reconciliación entre pobres
y ricos, indígenas y mestizos, partidos políticos, autoridades y ciudadanos, para que haya perdón y no odio, fraternidad y no enfrentamiento.
– Por ello exhortamos a todos nuestros
compatriotas a unirnos en una acción
conjunta para superar esta crisis poniendo en juego nuestros mejores valores.
Este 10 de abril de
2022 que cada persona discierna y analice lo que le parezca más oportuno para lograr el
progreso y la paz social de modo que México tenga vida digna.