Uso desmedido o sin precaución de las redes sociales en la conducta de los adolescentes
Uso desmedido o sin precaución de las redes sociales en la conducta de los adolescentes
Por Mtra. Irasel Negrete Ronzón
“Las redes sociales ya no son sobre sitios webs,
tratan de experiencias.”
– Mike DiLorenzo
Como ya
lo he mencionado
en artículos anteriores, la época
en la que nos desarrollamos
tiene una gran
relación con el
uso de la tecnología
y las constantes
innovaciones en ella, constantemente salen gran
cantidad de aplicaciones
web que favorecen la
interacción y vinculación entre individuos,
estas son las
redes sociales las
cuales son un
arma de doble
filo ya que así como nos
pueden tener a la
vanguardia en el
conocimiento de temas o acercarnos a
personas de distintas
latitudes, también pueden causarnos
inconvenientes. En el caso
de los adolescentes, ellos
pertenecen a una
población vulnerable debido a que
se encuentran en
una etapa de
transición de la niñez
a la edad
adulta, durante este periodo
están en la búsqueda
y construcción de
su identidad y
con una gran
necesidad de expresión
y aceptación, por
lo que, aunque resulten
muy hábiles para
el manejo de la tecnología y
las redes, podrían estar
propensos a hacer
uso de ellas
de forma inconsciente
resultando negativas la consecuencias
de su utilización, en especial cuando tienen
completa libertad y no
hay vigilancia por
parte de sus
tutores. Actualmente en México,
52.5% de los usuarios utilizan la red social entre dos y cuatro horas diarias
en promedio, mientras que el 17% permanece más de 6 horas, así lo reveló el
primer encuentro de estudio nacional «¿Cómo usan los mexicanos las redes
sociales?», coordinado por Luis Ángel Hurtado Razo, académico de la
Facultad de Ciencias Políticas y Sociales (FCPyS) de la UNAM, además
de ello, de acuerdo con un estudio del Instituto Federal de
Telecomunicaciones (IFT) publicado en 2016 un 88 % de los jóvenes mexicanos usa
internet principalmente para acceder a redes sociales.
El uso
de las redes
sociales ocupa varias
horas de cada día y ahora en
este momento de
aislamiento esa cantidad
aumenta, ¿pero qué pasa
con los adolescentes? ¿cómo incide
esto en sus vidas? Pues
bien, diversos análisis
exponen los efectos
negativos del uso de
las redes, entre ellos
se encuentran la ansiedad
y depresión debido
a que muchas
de las imágenes que
se muestran en
ellas brindan ideas de
una vida perfecta y
armoniosa, son fotografías
o videos poco
realistas que al
compararlas con su
vida, pueden hacerles
sentir que su
vida no es
tan agradable o bondadosa
como la de los
demás; otro efecto es la
disminución en la calidad
del sueño y
descanso ya que se
ha comprobado que el
uso de luces LED antes del sueño, puede interferir y bloquear procesos
naturales en el cerebro que desencadenan sensaciones de somnolencia, así como
la liberación de la hormona del sueño, la melatonina y
es que muchos
adolescentes utilizan sus
dispositivos antes de
dormir,por otro lado, el
FOMO, miedo a perderse de
alguna cosa, iniciales
en inglés de la expresión fear of missing out, es una nueva
manera de ansiedad en la que
está la necesidad
compulsiva de estar
conectado todo el
tiempo. Aunado a todos
estos efectos, también
se encuentra el
riesgo al acoso
cibernético ya que los
adolescentes normalmente se
hacen de contactos sean conocidos o
no en las distintas
plataformas que pueden
no estar haciendo
buen uso de
las imágenes, pláticas
o videos subidos
en sus redes,
este tema es
muy importante ya
que desencadena otros
problemas como bajo rendimiento académico, depresión,
ansiedad, sentimientos de soledad, cambios en los patrones de sueño y de
alimentación, que podrían alterar su vida
por lo que
es recomendable que
los adolescentes utilicen las
redes pero tengan
la supervisión y
asesoría de sus
tutores.
Sin embargo
no todo es malo
con el uso
de las redes,
estas también son
espacios de expresión así
como lugares donde
pueden construir relaciones
positivas y crear
comunidades virtuales que
les brinden apoyo
o mayor conocimiento
sobre temas de
su interés, además de
esto, las redes fomentan
su creatividad ya que
con la finalidad de
ganar “likes” generan
contenido atractivo, investigan
y aprenden sobre
el uso de
nuevas apps, a través
de las redes pueden
seguir a personas que
admiran y tener
modelos de vida
que los inspiren. Así que,
con toda
esta información, el apoyar
a los adolescentes
a hacer un uso
responsable de las redes
sociales debe ser parte de
nuestra responsabilidad como
adultos y en
especial como docentes.