VIVIR EN GRATITUD ESTA NAVIDAD
VIVIR EN GRATITUD ESTA NAVIDAD
Pbro. Juan Beristain de los Santos
En esta Navidad, Cristo ha venido del seno del Padre para revestirse de nuestra carne
mortal, por eso, Él es el único que nos puede librar de toda corrupción que existe en nuestra naturaleza caída. Navidad es agradecer profundamente esta acción divina que se
inclina hasta cada uno de nosotros, para rescatarnos de todo aquello que nos hiere y avergüenza cuando lastimamos y ofendemos a los demás a causa de nuestro egoísmo. Este tiempo de gracia y bendición de la
Navidad se extiende durante 8 días con el firme propósito de saborear el amor y
condescendencia de Dios, que nos ofrece libremente un proyecto de vida real y profundo.
En esta Navidad contemplemos el nacimiento que se ha puesto
en casa, en la parroquia o en los
espacios públicos con la finalidad de tener cerca el misterio de Cristo que se ha revestido de nuestra
condición humana. El Papa Francisco, en
su Carta Apostólica “El bello signo del nacimiento”, nos recomienda volver la mirada al Belén para que descubramos algo
impresionante de Dios: “El modo de
actuar de Dios casi aturde, porque parece imposible que Él renuncie a su gloria para hacerse hombre como nosotros. Qué sorpresa ver a Dios que asume nuestros propios comportamientos:
duerme, toma la leche de su madre, llora y juega
como todos los niños».
El bello actuar de Dios es para que nosotros alcancemos la
plenitud de la vida humana en las circunstancias propias de nuestra vida diaria.
Esta Navidad será única si decidimos aprovechar la ocasión
para comenzar a valorar todo lo que
somos y tenemos; valorar todo con el firme propósito de estar agradecidos con Dios por la salvación que nos ofrece y con
todos los que tenemos cerca de nosotros.