¡VOY A GANAR!
¡VOY A GANAR!
CARMEN MORA
Por Mary Paz Monzón Rojas
Coatepec, Veracruz, mayo 2021.- Transformación total, es la impresión que nos deja haber charlado con señora Carmen Mora, candidata de Morena a la Diputación Federal quien busca nuevamente la elección consecutiva.
Mujer emprendedora y de éxito, gracias a una disciplina de trabajo forjada desde hace cuarenta y ocho años, es la fórmula de su éxito en su negocio y en su persona, las claves innovación, dedicación y capacitación para ella las personas que trabajan en su empresa.
“Mary Paz, no hay más que trabajo, ese ha sido mi vida”.
¿Cuál ha sido su experiencia en el Congreso?, su vida dio un giro de 180º, usted tenía una rutina hecha y todo cambió.
“Déjame te cuento, un día viendo el canal del Congreso me pregunté: ¿qué se sentirá estar ahí?, fue como un sueño, porque años después me encontré en el recinto siendo una desconocida y me dije en mis adentros: esto no es lo mío. Fue difícil al inicio”.
¿Qué sintió? “Nervios, felicidad, alegría, mis dudas saltaron en mi cabeza”. Comenta de forma muy natural. Continúa, sin necesidad de preguntas. “La tribuna impone, al llegar es una sensación diferente, uno se siente importante, imagínate soy uno de 500 diputados que representa a 130 millones de mexicanos, es un orgullo y una gran responsabilidad. Tal vez eso, me hizo asumir el reto y controlar los nervios”.
¿Cómo fue ese proceso?, seguramente pasó momentos difíciles. “Sí, tuve mis tragos amargos, adaptarme al grupo, a los compañeros, conocer a personas con maestrías, doctorados, pero poco a poco avanzamos. ¿Cómo se adaptó? “Soy observadora, todos los días aprendía, observaba y me dije: si ellos pueden, yo también, ¡Claro que lo pude hacer!
¿Las discusiones…?, la candidata me interrumpió emocionada: “Me encanta y más cuando está el compañero Fernández Noroña, una eminencia”.
¿Cuántas veces ha subido a Tribuna?, y ¿cuáles ha sido sus propuestas? “No sé, cinco o seis veces. Déjame te cuento, pasaban los días y en las previas a las plenarias, yo veía que los compañeros recibían las encomiendas, pero yo no. Quería subir, tenía que pasar. Para ello, seguía observando y preparándome.
¿Tenía experiencia hablando en público? “Sí, fue en campaña cuando López Obrador vino a Xalapa, había que irlo a esperar. Yo pregunté: ¿hay que hablar?, me dijeron que no. Al llegar, vi las calles del centro llenas Úrsulo Galván, Lucio, esperaba cuando sorpresivamente me preguntan: ¿es usted la candidata Carmen Mora? “Sí, soy yo”. Suba a hablar, tenga el micrófono mientras llega AMLO.
Ese fue un reto, subí al templete, me temblaba las piernas al caminar por el pasillo que se me hizo largo, largo y cuando llegué creí que me caía, me tomé del barandal y por arte de magia tomé confianza. Salí adelante”. Sonríe doña Carmen, al recordar la anécdota.
¿Y en el Congreso? “Un día en la previa de mi bancada yo externé mi deseo de subir a tribuna. Me dijeron que esperara. A lo que respondí: tengo que hacerlo. No fue hasta la celebración de los 500 años de Veracruz, cuando solicité el leer el texto conmemorativo, los compañeros diputados dijeron: Va Carmen, y yo dije: Sí.
Subí con mis compañeras diputadas vestidas de jarochas, fue un momento increíble, que lo guardo en el corazón.
Por eso, cuando alguien dice, ‘eso no se puede hacer’, respondo: ¿por qué no?, nosotras podemos, tenemos dos brazos, dos piernas. Además, las mujeres tenemos un sexto sentido, en el día a día sacamos adelante la casa, la cocina, el negocio, los hijos, somos buenas administradoras, ya que con poco dinero podemos salir adelante. Si podemos hacer esto, porque no podemos estar en la política”.
¿Qué diferencias encuentra entre esta
campaña y la anterior? “La gente está contenta, yo no pedí
contender nuevamente, me incluyeron en la encuesta estaba en la preferencia y
aquí estoy.
Recibo
agradecimientos de la gente por lo que ellos reciben, no los doy yo, los da el
presidente con dinero del pueblo, es justicia. Hay muchas personas en el tema
pobreza por eso están felices, nos echan bendiciones, eso es una gran
satisfacción. Tenemos los programas sociales que ayudan a discapacitados que se
encuentran en pésimas condiciones los programas no han venido a solucionar, les
ayuda ahora viven más desahogados.
Y
los jóvenes, con sus becas, yo lo hubiera querido tener, que te paguen por
aprender. Yo sufrí, trabajaba por diez pesos de cinco de la mañana a cinco de
la tarde y si la gente no lo valora que desagradecida. Incluso, hay jóvenes que
invierten para poner su propio negocio es una cadena.
Sembrando
Vida, a quienes tiene una o media hectárea se les apoya para la reforestación
para que no talen y cuiden los bosques, el agua y el medio ambiente.
El
fin de semana estuve en Perote, justo en la caja de agua y me pidieron apoyo
para reforestar 1500 hectáreas. Yo no me comprometo lo que no puedo cumplir,
pero le hago la lucha y muy pronto les daré la buena noticia en mis gestiones
en CONAFOR para entregar al comisionado ejidal una dotación de árboles
especiales para aquella zona”.
Carmen
Mora, la candidata tiene una nueva imagen la vimos suelta, segura, confiada,
participa en la Comisión de Ganadería, Auditoria de la Función Pública y
Seguridad. Se emociona, al platicar de los proyectos, mueve las manos y con
ello le da fuerza a sus frases elocuentes, está en campaña. Prosigue su arenga:
“Los tiempos ya cambiaron, ya nos son aquellos cuando los diputados recibían
muchos beneficios y bolsas de dinero. Se acabó todo aquello. Yo no iba con la
intención de beneficiarme, ni por un salario alto, trabajo y tengo un salario
digno y luchó por ayudar a la gente humilde. Instalé casas de campaña en
Teocelo, Coatepec, Perote y Banderilla, las dos primeras están trabajando muy
bien, la gente acude me dan sus peticiones, me llaman para dar las gracias. Eso
me da fuerza porque estoy cumpliendo, es un orgullo que la gente me pida que
sea diputada. Es un compromiso, donde hay que trabajar el doble”.
¡Voy
a ganar!, con voz firme remata Carmen Mora. Prosigue para remeter, “los
anteriores políticos tuvieron la oportunidad de hacerlo mejor, pero los
recursos no lo distribuyeron al pueblo. Yo a donde me paro nadie me puede decir
que me quedo con los recursos. ¿Y cómo le voy hacer? Si hay muchas necesidades
y demasiadas peticiones. Hay gente que vive sin servicios, en pésimas
condiciones ¿y nuestras autoridades qué han hecho?”
¿Cómo ve a Coatepec? “Es
hora de cambiar, debemos apoyar al campo a los productores de papa, maíz,
trigo, café. Coatepec tiene lugares maravillosos con ellos se puede impulsar el
turismo.
Ahí
tienes el proyecto de los túneles se les debe apoyar para detonar el turismo y
la economía, somos pueblo mágico.
¿De dónde obtendrá los recursos, si el
programa carece de ellos? Hace una pausa y responde: “De la
inversión privada con el apoyo de gobierno, los empresarios de Coatepec se
deben unir.
Al
igual para la conservación del agua, se tiene que trabajar reforestando y en
las ciudades hacer conciencia. Captar agua de lluvia entre otras cosas.
Existen
ciudadanos con proyectos, a ellos hay que atenderlos por el bien de todos. Lo
mismo el tema de la basura, hay temas que no me corresponden, pero puedo hacer
una gestora para atraer recursos, cada día hay más fraccionamientos y plazas
que requieren de servicios…
Algunas
personas me han dicho, ¿por qué se metió en esto otra vez?, si usted no tiene
necesidad. Tienen parte de razón, pero esta experiencia me ha permitido conocer
las adversidades de muchas personas, la pobreza que viven. Por eso, yo vengo
pensando qué hacer, cómo vamos a dar solución a estos y con las relaciones y
amistades que he generado en el congreso, como la compañera diputada Tatiana Clouthier,
me puedan apoyar. Debemos atender a todos.
También
me pregunto por qué algunas gentes quieren votar por los mismos, ¿por qué son
masoquistas?”, se cuestiona.
Antes
de despedirse hace a través del Regional envía un reconocimiento a la gran
labor que realiza su equipo de trabajo a ellos los voluntarios que le acompañan
agradezco su apoyo. Y envía un mensaje a los coatepecanos: “En mi calidad de
diputada federal quiero contribuir a mejorar a mi tierra.
La
gente ya despertó no es la misma, sabrá elegir”, concluyó sonriente Carmen
Mora.