…y cuando el Peje dijo “¡Hágase la luz!”, llegó Bartlet
...y cuando el Peje dijo "¡Hágase la luz!", llegó Bartlet
Por Edgar Hernández*
Seis días tardó Dios en crear el universo (Génesis
1:1-2:3), al Peje, sin embargo, le ha costado un poquito más, 18 meses, porque
hubo que rehacer todo.
Según la narración de “La Creación del Génesis”,
Dios creó el cielo y la tierra, la vida vegetal, animal y la del hombre, Adán,
a quien quita una costilla para crear a la mujer, Eva, a quienes lleva al
Jardín del Edén.
En México, sin embargo, las cosas no han sido
iguales ya que el “Edén” lo ocuparon los “fifis”, los conservadores, los
políticos enriquecidos de manera ilícita y los que no compran en los
changarros, sino en la “Comer”.
Según la 4T, para el Señor de los Cielos, no Amado
Carrillo el del Cártel, sino Andrés Manuel López Obrador, todo fue más sencillo
ya que él empezó de cero, pero ya con la tierra hecha un desmadre y México bajo
el mando de la “Mafia del Poder”, pues, la neta, es que ha costado un poquito
más de trabajo.
Y es que reconstruir es más difícil que construir, según la sabiduría pejista.
Pero todo finalmente ha sido posible con abrazos y
besos; con un par de zapatitos, un pantaloncito y un auto de uso -como los que
hay en Cuba- para que alcance para todos.
Desde luego que la generosidad de las “Tablas del
Peje” -que no las del Moisés- no tiene límites, ya que a esa aparente
austeridad se ve colmada con unos frijolitos con arroz ¿Tortillitas de mano
también y uno que otro tamalito? ¡Bueno, eso de los tamalitos eso aún no se
sabe!, pero sí que toda esa abundancia alcanzará para todos porque “¡Primero
los pobres!”.
Y ya encarrerado el gato, para los enemigos de
México que se apropiaron de las playas “¡Fuchi caca!”.
De volada mandaron a llamar a la Secretaria de
Turismo de Veracruz, Xóchitl Arbesú para que instalara unas playas -que
provisionales ni que nada- en Poza Rica y Papantla y… ¡A gozar mi negro!
Las pandemias, el azote de la humanidad.
Con la 4T ¡Para nada! Eso no existe. Nomás no sucede
ya que “no robar, no mentir y no traicionar ayudan mucho a que no dé
coronavirus” (versículo 8:29 de las ocurrencias del Peje).
Un molito de Puebla, como esos que recomienda
Barbosa, un caldito de pollo con harto chile o gotitas de “namomoléculas”, de
las que se pone la Secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero y ¿Cuál es
el purrum?
En realidad, la 4T es una bendición.
Hace magia. Hace que veamos “honestos” a los
corruptos, “benditos” a los inútiles y capaces a los lerdos.
Ese milagro nos consta en Veracruz en donde 8
millones 200 mil habitantes de ser ciegos recuperamos la vista para ver el
jardín del Edén Jarocho sin malosos, nuestras mujeres bien cuidadas e
invioladas, con tantos empleos que ya ni dan ganas de trabajar y en donde todos
los periodistas portamos chalecos antibalas.
¡Qué maravilla!
Así, relata el Génesis Tolteca, desde el primer día
de la creación del mundo de la 4T, se dispuso la descentralización de todas las
dependencias del gobierno hacia el interior del país y mover a 1.7 millones de
burócratas…
No pudo, pero ¿qué tal nos apantalló?
Así, cuando dice “¡Me canso ganso!” o que “El pueblo
se cansa de tanta pinche transa” y que anda muy bien de bateo “porque macaneo
muy bien”, es porque habrá sorpresas, nuevas ocurrencias.
Gracias a ello, perdonó a Salinas y Peña, dejó libre
a Ovidio, hijo del Chapo Guzmán y entregó cuantiosas inversiones a Slim y
Ricardo Salinas Pliego.
El, don Peje, siempre responde a “lo que diga mi
dedito” porque es quien manda y no es florero.
En realidad, él es todo. Es el que regala dinero a
los “Ninis” para que se sientan como los querubines del cielo y voten por
Morena.
El Dios Peje ha sido tan asertivo que en otra ocasión
adelantó que “si el presidente es honesto, los gobernadores serían honestos… y
los alcaldes igual”, cosa que tampoco ha sucedido, pero ello se debió a que
llegaron tarde a esa reunión.
Parte de sus Tablas, no de Moisés, sino los tablones
y mezcla del Peje, son ahora la solución a la vivienda, porque ha de saber que
ahora usted puede construir su casa sin necesidad de planos, arquitectos e
ingenieros, un coladito, las chelas pa´los macuarros y ya estufas.
Dar amnistía a los narcotraficantes si las víctimas
están de acuerdo, es otro de los mandamientos que no han podido cumplirse ya
que las “victimas” que pasan de los 50 mil en 18 meses, no quieren hablar
porque están bien pelados, pero la idea sigue siendo buena.
Hay que reconocer que algunas cositas de don Peje las
ha imitado de Trump como los memorándums para echar abajo la reforma educativa
de Peña Nieto o para dispensar los concursos para la obra pública, preferencias
para el “compadre” de la Nahle, o compra de medicinas, respiradores para el
hijo de Bartlet, pero eso es pecata minuta.
Lo importante, tal como lo dijo en Alvarado, es que
“estoy esperando el oro de Moscú” para dárselo al pueblo bueno… ¡Bien por
Manuelovhci!
México es el nuevo mundo donde hay que darse abrazos
no balazos; es en donde el que manda, siempre tiene “otros datos” y ha
prometido que un día acabará con “la mafia del poder” y la prensa “fifi”.
Ahí está ¡Pueblo Bueno! el creador del nuevo México,
el del “¡Cállate chachalaca!”, el “No soy monedita de oro” y quien aparenta más
años pero “lo que pasa es que estoy aflojado en terracería”.
Es aquel a quien no gusta este tipo de escritos
porque son parte de un “complot”, ¡Ni modo!
Tiempo al tiempo.
*Premio
Nacional de Periodismo