Ya solo faltan 14 días ¡David en picada!
OPINIÓN
Ya solo faltan 14 días ¡David en picada!
Por Edgar Hernández*
En el cuartel de la Alianza no hay preocupación, hay
pánico.
El ¡Se los dije! hoy suena a burla ante el desmoronamiento de las
aspiraciones de David Velasco Chedraui, quien a dos semanas de las elecciones se
encuentra muy por abajo respecto al puntero Ricardo Ahued.
Aproximaciones internas de Morena hechas públicas y
desmentidas por el propio David, lo colocan 26 puntos abajo. Otras, las de la Alianza,
de manera más optimista, lo ubican 5.6 puntos abajo.
Son aproximaciones porcentuales que se irán cerrando
los próximos días, pero no tanto dada la pulverización del voto que tiene en la
ciudad capital a 9 candidatos en campaña.
En realidad, el candidato de la Alianza PAN-PRD-PRI para
la alcaldía de Xalapa, nació muerto.
Con David Velasco, el desgaste sufrido durante el
proceso interno de selección se sumó a su decadente imagen.
El otrora galán de una década atrás que su sola
presencia generaba votos, se convirtió en el desdentado y decadente aspirante sesentón
que hoy transita solo, desairado, con mítines chafa y volantitos en mano que
nadie acepta y que sus mítines, aun trayendo a personajes como Santiago Creel,
no despiertan ni el ánimo, ni la participación ciudadana.
Regresó a la memoria aquel alcalde que jamás supo dónde
estaba parado al dejarse jalonear por grupos de interés, una ciudadanía
inconforme por los pésimos resultados y por si no fuera suficiente, por un
gobernador, Fidel Herrera -que fue quien lo impuso- que no lo bajaba de
“Tontín”.
Regresó al imaginario colectivo aquel gris diputado
local que poco hizo por su tierra desde la tribuna donde se desempeñó de forma
mediocre.
El siguiente refugio de David, ya como nada, sería
regresar a seguir haciendo bolsas de empaque de plástico para el único cliente
que ha tenido en su vida, las tiendas Chedraui, hasta que de nuevo, luego de un
pleito entre las familias Chedraui y Fernández, se decidieron apoyarlo para
regresar a la alcaldía.
¿A qué?
El retorno de David no sería fácil dado que no solo
se enfrentaría a una nueva Xalapa, erosionada por la pobreza ante la brutal
explosión demográfica, sino ante el reto de las nuevas fuerzas políticas ahora
en manos del Partido Acción Nacional.
Así las cosas, sin embargo, se la jugó.
Le invirtió y se comprometió en abierto con quienes
finalmente tomaron la decisión. Lo más grave, sin embargo, fue haber pactado
con la delincuencia política, con los hacedores de engaños, con los mafiosos de
las peores épocas del priismo.
De entrada y con tal de cumplir su capricho, acudió
al dedazo nacional de México pactando con la dirigencia nacional del PAN que
terminó por echar a la basura a su propuesta natural, Sergio Hernández y toda
su familia de rancia tradición panista.
Luego, para congraciarse con el PRI entregó la
plantilla a una bola de impresentables como el gánster de antro Alfredo Niño,
un conocido raterazo de mal fario a su paso como contratista de obras para
“Espacios Educativos”.
Otro pícaro fue sumado a la planilla de regidores,
el hijo de Reynaldo Escobar, de negro historial. Al abanico se sumaron asimismo
Corintia Escobar de cuestionada reputación y Minerva Vázquez, chantajista de “Antorcha
Campesina”.
Así, con esa caterva de apoyadores se fue de campaña
siempre llegando tarde a los eventos, con sueño y con la cantaleta de siempre
“¡Cuando llegue cumpliré!”.
Ese prometer sueños de opio como dar salario a
millares de jefes de manzana y abrir la nómina de empleo a jóvenes que voten
por él, terminaron por matarlo.
Xalapa, con diez aspirantes, la mayoría de ellos con
propuestas claras y atractivas, con ganas de votar por ellas y sus exponentes;
sangre nueva; gente nueva; con iniciativas de cambio de verdad que desde el
arranque han despertado el ánimo jalapeño, nada tienen que ver con las
propuestas paniaguadas de David del “no regresaré dinero a la federación y
renacerá la Ciudad de las Flores”.
¿Con esas prendas quiere ganar?
En
David Velasco Chedraui bien aplica aquello de que el hombre es el único animal
que tropieza dos veces con la misma piedra.
Es por
ello que en el imaginario colectivo, la terna que desde hace algunos días se
perfila para disputar la final se ubica entre Ricardo Ahued, Cinthya Lobato y
Pepe “Chocolate”.
Ahued está a la cabeza, pero con Xalapa no hay pacto
de sangre con ninguno, menos con Morena por los pésimos resultados del otro
atarantado, Hipólito Rodríguez.
Estamos a dos semanas de saber quien se llevará la
Joya de la Corona ¿Será un varón? ¿Será una mujer?
Tiempo al tiempo.
*Premio Nacional de Periodismo