BREVE PASEO POR EL AYER (II)

La otra versión:                                                                                                               René Sánchez García.

Siguiendo con las historias de la Calle Real o Pedro Jiménez del Campillo, de esta ciudad mágica de Coatepec, allá por los años sesenta del siglo pasado, prosigo haciendo funcionar la memoria de mi niñez. Pues bien, en las esquinas de las calles de 16 de septiembre y Jiménez del Campillo se encontraba una tienda grande surtidora de semillas y abarrotes propiedad de Don Samuel Sarabia, cuyo nombre era “La Nacional”, debido a un premio de la Lotería Nacional obtenido por su propietario años atrás. Siguiendo dicha rúa se encontraba un pequeño taller de zapatería, atendido por Don José Hernández y su hijo “El guangoche”.

Más adelante la radiodifusora XEGR, primera y única en su tipo instalada en esta ciudad cafetalera. Después las instalaciones de la Cruz Roja, donde aparte de guardar su única y vieja ambulancia gris, se hacían curaciones sencillas a los humanos que lo requerían. Caminando adelante nos encontramos con la aún Iglesia del Corazón de Jesús, que por aquellos tiempos era atendida por el presbítero Pedro Leal Lemus. Junto a ella la Talabartería “El Tigre”, fundada por Don Sostenes Guzmán Durán, especialista en sillas de montar y la distribución de artículos deportivos, especialmente del Béisbol. Recuerdo allí haber conocidos a varios jugadores profesionales de la Liga Invernal Veracruzana.

En la Casa de Altos, tal y como se le conoce, se encontraba la Talabartería “El Venado”, propiedad del político Leobardo Zarco Burgos, cuyo eterno ayudante lo fue siempre Don Rafael Sánchez Ameca. Y finalmente haciendo esquina con la calle de Hidalgo, encontrábamos a Casa Hakim, propiedad de Don Felipe Hakim Simon, distribuidora de Gas Xalapa, así como la venta de electrodomésticos. Cruzando dicha calle llegamos a la tienda de abarrotes y distribuidora de granos y semillas, cuyo propietario fue por años Don Celestino Martínez Collado. A su lado una súper viejísima zapatería popular de la señora Consoli. Más adelante dos negocios de una misma familia: Casa Morales y Farmacia “La central”. La primera atendida por dos señoritas de apellido Morales y la otra una botica atendida por Don Leobardo García Batle.

En la casa perteneciente a Don Santiago Todd, estaba una dulcería de calidad o de primera, atendida por una amable señorita de nombre Teodorita Polanco. En la casa propiedad de Doña Inesita Rebolledo existieron comercios de peluquería (Hermanos Solís), Zapatería (Distribuidora de la marca 3 Reyes), Relojería (del señor Camacho) y otro más que no recuerdo, pero creo que era una Sastrería. Venía después la venta de las nieves, paletas y dulces más sabrosos de la región, que en algún tiempo se conectaba con el inolvidable Cine Imperial. Si la memoria no me falla, estaba a continuación la ferretería más surtida de la ciudad, que fue siempre de la familia Cuevas Saldo. Como olvidar el Sitio 22 y 15, (taxis) que por mucho tiempo se situó en la casa de la familia Amorós Guiot, (hoy Casa de Cultura de Coatepec) al igual que la sucursal del Banco de Comercio de Veracruz.

Cruzando la calle nos encontrábamos con el edificio de la Escuela Secundaria Nocturna General para Trabajadores número 7, que fue dirigida por muchos años por los profesores José Moreno Guzmán y Efrén Ramírez Hernández. Finalmente llegamos al atrio dedicado a San Jerónimo, atendida por quien muy pronto será nombrado Santo por el Vaticano, me refiero al Padre Juan Manuel Martín del Campo. Agradezco a un amable lector que me indicó que en la casa del Dr. Sebastián Flores Villareal, se encontraba la Delegación de Tránsito, a cargo de Don Antonio de la Cerda, conocido por su escandalosa motocicleta que abría los desfiles de aquellos inolvidables años de los sesenta del siglo anterior.

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