CRÓNICAS DE VERACRUZ 1914
CRÓNICAS DE VERACRUZ 1914
Por
Rafael Rojas Colorado
Amigo lector, es un placer el compartir el gusto de la lectura con usted, pues es una manera de embellecer el alma, de disfrutar un momento de esparcimiento al tiempo que se enriquece el conocimiento. Un libro es un verdadero amigo que nos cuenta sus historias, algunas revestidas de alegría, de pasiones, de amor y hasta de fantasías, pero otras nos revelan tragedias, oscuras circunstancias que nos irradian la impotencia frente a la superioridad de otros seres que poseen el poder, Tal es la experiencia que sufrieron los ciudadanos del puerto de Veracruz, ante el desembarco de las fuerzas norteamericanas el 21 de abril de 1914 para ocupar la ciudad porteña.
Crónicas de Veracruz 1914, es un libro ilustrativo escrito por la historiadora Olivia Domínguez Pérez. En estas páginas muy a pesar de que se nota la superioridad de los soldados norteamericanos, las fuerzas federales y los cadetes de la Escuela Naval Militar, hicieron la defensa de la ciudad, pero sobre todo se reconoce el valor y amor a la patria de los ciudadanos que demostraron la fuerza interior por defender la patria chica. Fue un día de infierno, pero también de gloria, porque el valor y el amor a la patria no tiene límites y los ciudadanos y militares mexicanos sacaron a flote la casta.
En esta amarga experiencia bélica jugaron un
papel de suma importancia las religiosas Josefinas, auxiliando heridos e
inyectándoles el aliento espiritual a los combatientes en esos momentos en los
que la muerte rondaba por las calles veracruzanas., lo mismo la “Cruz Blanca
Neutral” y la “Cruz Roja” que no se daban abasto.
Dicen las letras de Olivia Domínguez que, en
el año de 1913, el régimen de Victoriano Huerta que solo estuvo vigente durante
17 meses, siempre tuvo en contra la oposición de Venustiano Carranza, la misma
que manifestó en el Plan de Guadalupe el 18 de abril de 1913. Huerta contaba
con la alianza de Félix Díaz Prieto. Victoriano Huerta contaba con un ejercito
sumamente profesional y buscaba la pacificación social y el reconocimiento
internacional. Sin embargo, recurrió a préstamos forzosos y disolvió el
Congreso de la Unión, por esas fechas mandó a callar esa voz de libertad del
senador Belisario Domínguez que clamaba la renuncia de un presidente ilegítimo.
Carranza avanzando por el norte del país y los huertistas retrocediendo, a esto
se sumaba el embargo económico que imponía el presidente de los Estados Unidos
de Norteamérica, William Taf, en el que se prohibía la venta de armas.
Al siguiente año Carranza y el nuevo
presidente Woodrow Wilson, acordaron la destitución de Huera, pero finalmente
Venustiano Carranza no estuvo de acuerdo en que intervinieran los
norteamericanos en los conflictos revolucionarios.
El 12 de enero se suspende el pago de la
deuda pública por un espacio de seis meses, no se cubrirán intereses a los
capitalistas extranjeros.
Ante la falta de armas, Huerta hace compras
de armamento en países europeos y del Japón, el barco Ypiranga venía con un
cargamento de armas las cuales se llevarían en locomotoras a la capital de
país, imposible pasar ante los 40 buques estadunidenses que estaban anclados
frente a las costas veracruzanas. Sin ninguna declaración de guerra el
conflicto bélico comienza y en ella pierde la vida el teniente José Azueta Abad.
Amigo lector, lea
Crónicas de Veracruz, un texto con muchas ilustraciones y con letras que nos
abren sus ventanas para mirar a través del laberinto del pasado, verá aquella
madrugada del 21 de abril del 1914 cuando comenzó el ataque y el desembarco, lo
mismo sucedió al día siguiente, los reflectores de los barcos enemigos
iluminaban la ciudad, tiros muertes, heridos, pánico, dolor, impotencia y odio,
tal vez para muchos les hacía falta la presencia de Dios. “Un libro lo guiará
por el camino que conduce hacia la sabiduría.