CoatepecDestacado

Ecos de la Vista Presidencial

Comparte

 

 

 

 

 

 

 

Por Olivia Cadillo Salazar, Mary Paz Monzón y Héctor Larios

 

La tarde del pasado viernes 31 de mayo, el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, arribó a la unidad deportiva Adolfo López Mateos, de Coatepec para el inicio de la entrega de apoyos del Programa de Bienestar a Cafeticultores.

 

A pesar de la lluvia que desde las 2 de la tarde cayó, simpatizantes de AMLO asistieron al evento para apartar un buen lugar y poder estar cerca del primer mandatario, la expectación fue mayúscula. La mayoría de los asistentes fueron adultos mayores.

 

Tráfico fluido en las calles porque en cada esquina oficiales de tránsito realizaban eficientemente su labor, camiones se congregaron en calles contiguas traían pasajeros de diferentes lugares como colonias populares y municipios vecinos.

Miles se instalaron bajo la enorme carpa instalada de área a área del campo de futbol, la entrada principal, empleados de gobierno formaron una valla los conducía a los accesos, a la derecha solo los elegidos pudieron pasar, era la zona VIP, funcionarios, diputados y familiares la llenaron rápidamente. Dos secciones más de este a oeste flanquearon un pasillo por donde entraría el esperado ejecutivo federal y su comitiva.

Me canso ganso, al gusto

A nuestro paso, vendedores ofreciendo recuerdos con la figura del visitante y la leyenda “me canso ganso”, daban el color de la tarde lluviosa con paraguas para la ocasión. Faltando unos minutos para las 18:00 horas, por la puerta norte arribó el vehículo donde venía Andrés Manuel, bajó saludando a las personas, caminó en sentido contrario al pódium para entrar por el pasillo central, recibiendo cientos de peticiones cartas, currículos, guardados por su escolta de féminas en una maleta negra, no faltaron solicitudes de selfies para el recuerdo y regalos, así hasta llegar el presídium 35 minutos después.

 

A su paso no faltaron las mantas, cartulinas y gritos de aprobación y desaprobación de algunos asistentes donde se leían frases como: “¡Devuélvannos nuestra paz!”, “No al desalojo de nuestras casas”, “No a la mina, sí a la vida”, entre otros.  Pero, también se vieron personas saludándolo con afecto. La polarización social también acudió al evento. Algunas voces femeninas rezaban al verlo pasar: ¡Que Dios te bendiga!

 

Fue el gobernador de Veracruz, Cuitláhuac García Jiménez, quién dio la bienvenida al presidente, con fuerza inusual emitió su mensaje, argumentó causas a favor del medio ambiente, el turismo y aseguró: “ya llegó un Gobierno que le hace caso al pueblo”.

 

Por su parte, el secretario de Agricultura y Desarrollo Rural, Víctor Manuel Villalobos Arámbula, informó de las bondades del Programa Bienestar para el Campo, un apoyo económico de cinco mil pesos por productor que serán depositados directamente a cada uno con la finalidad de compensar los bajos precios e invertir en plantas de alta calidad resistentes a la roya, insumos de nutrición, manejo de plagas y enfermedades.

 

De igual forma, la Secretaria de Bienestar, María Luisa Albores González, presentó los Programas de Bienestar, dirigidos a Adultos Mayores, Pueblos Indígenas, personas con discapacidad y a los jóvenes que luchan por cumplir sus sueños.

Finalmente, llegó el momento esperado, en medio de aplausos, el mandatario dijo: “Veracruz es un estado rico con pueblo pobre porque puro sinvergüenza llegó a gobernar, el problema no es la falta de presupuesto, sino la corrupción, por eso se abandonó el campo veracruzano y muchos se vieron obligados a emigrar al otro lado de la frontera”. Justo cuando declara que se acabaron los intermediarios y los apoyos serán otorgados directamente, iniciaron los gritos de protesta de integrantes de la organización Antorcha Campesina.

 

Sin inmutarse el presidente, presumió el establecimiento de precios de garantía para productos del campo como maíz, frijol y arroz. Habló de los programas prioritarios de su gobierno, asegurando que su plan va en beneficio de los ciudadanos, por ello “vamos a cumplir, no vamos a quedar debiendo y acabaremos con la corrupción, me canso ganso”, aseveró. Reconoció que son muchos los problemas que se enfrentan citando una frase bíblica: “el pueblo tiene hambre y sed de justicia” y aseguró que sin permitir corrupción la saciarán desde el gobierno federal.

Para finalizar, López Obrador, emitió la nota del día, reiterando su apoyo a Cuitláhuac, dijo: “es un hombre inteligente, preparado, con convicciones, pero sobre todo un gobernador honesto y lo puedo gritar a los cuatros vientos”. Los aplausos no se hicieron esperar, llegando el momento catártico al entonar el himno nacional y exclamando ¡Viva Coatepec, Viva Veracruz, Viva México!

 

El presidente alzó la mano en señal de despedida y bajó por las escaleras del pódium para dirigirse rápidamente a su vehículo.

 

El presídium lo integraron Carmen Mora, Diputada Federal por Coatepec; Gloria Sánchez Hernández, Senadora por Veracruz; Ernesto Pérez Astorga, Senador por Veracruz y Enrique Fernández Peredo, alcalde de Coatepec. Así como beneficiarios de los Programas de Bienestar anteriormente mencionados.

 

La lluvia cesó, el campo se fue vaciando poco a poco, solo quedó el lodazal que mañana recibieron a los deportistas. A la salida, risas, saludos y la compra del recuerdo de fanáticos, frases chuscas de la alegría jarocha y el amigo que decidió dejar su cartera en casa y solo llevar 150 pesos por precaución, le robaron su llavero del peje, su dinero y su inocencia durante el evento. Estos fueron ecos de la visita presidencial.

 

 

 

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *