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El descontento marchó en domingo

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El descontento marchó en domingo

Por Héctor Larios Proa

CDMX, sábado 3 de octubre 2020, 9:00.- En el monumento a la Revolución, se instalaron 4 mesas con notarios para registro de las personas que acudieron a la marcha. A esa hora el número era el 22,567.

Acudieron familias, personas de todas las edades acompañados de amigos, vecinos, iban solos, en parejas, algunos acompañados con hijos, caminaron desde la Plaza de la República, tomaron Reforma, hasta Av. Juárez, atravesaron Eje Central hasta llegar al Zócalo. La marcha era un espectáculo de colores patrios portaban playeras de la selección, parecía escenario propio de la campaña ponte la verde, sobre las largas filas ondeaban cientos de banderas, con esporádicos gritos de fuera AMLO, cartulinas con mensajes como: “fuera el peje”, “AMLO mentiroso y traidor”.

En algunos puntos de la alameda decenas con banderas de morena gritaban: “es un honor estar con Obrador”. Algunos agredían verbalmente provocando a los simpatizantes de FRENNA, afortunadamente no se registraron incidencias.

Era notorio que el ambiente festivo, sin agresiones, sin responder a provocaciones las sonrisas predominaron, parecía un paseo dominical masivo. Al llegar al zócalo para mi sorpresa estaba lleno y la gente seguía llegando por la calle de Madero, Venustiano Carranza, Isabela Católica y 20 de Noviembre que se sumaban a la protesta por el mal gobierno, el descontento caminó en domingo. 

De acuerdo a los organizadores los registros pasaron de 173 mil, al mediodía pero seguramente fueron más que no se registraron. Platicamos con algunos provenientes de Querétaro, Guanajuato, Michoacán, Jalisco, Sinaloa, Chihuahua, y hasta de Tabasco, dijeron no ser acarreados iba por su voluntad creídos que el presidente cumpliría su palabra si la marcha llegaba a 100 mil.

Se instalaron más tiendas de campaña, para el lunes en la mañana contabilicé 665 la mayoría vacías. Dicen que pagan hasta 150 pesos diarios, sin poder confirmar la versión, los que pernoctaron se veían organizados predominaron los jóvenes. El campamento está rodeado de tres hileras de vallas protectoras, había presencia policiaca e innumerables personas tomando fotos y trasmitiendo en vivo para redes sociales.

Cuentan con baños portátiles, y servicio médico. Sin duda no son los protestantes profesionales que, a lo largo de décadas de negarles atención a los problemas ciudadanos, encontraron su fuerza como grupo de presión, cuentan con una clientela de desposeídos con los que negocian predios, presupuesto, y otros cotos de poder. Grupos que se venden por posiciones a cambio de votos en tiempos electorales.

Una marcha de más de 175 mil personas se congregó en el zócalo con la consigna de la renuncia de López Obrador, ante el mal gobierno. Un movimiento sin estructura ni organicidad que pueda conducir el descontento social que ha generado en algunos sectores sociales. La ausencia de liderazgo es presa fácil, desde el púlpito de Palacio Nacional se dice que los fifís son pocos y no deben tener ansias.

Más allá de chairos y fifís, el descontento es real, se corre el riesgo de que sea cooptado por su falta de liderazgo y estructura.

¿Podrán enfrentar y despertar al resto de la población canalizando el descontento social? ¿Podrán enseñarle el padre nuestro al cura? A quienes patentaron y vivieron de las protestas sociales, corrompiendo las luchas sociales.