EL DIARIO DE UN SEDUCTOR
EL DIARIO DE UN SEDUCTOR
La pequeña obra del filósofo y
teólogo Danes S. Kierkegaard, es una íntima confesión al amor frustrado, ese
amor que el propio autor siente por su musa y del que no es correspondido,
desahoga en las páginas de un diario personal su pasión, el amor y todos los
atributos que un enamorado es capaz de concebir por el ser amado. La hoja de
papel es su confidente, a ella confía sus sentimientos mudados en letras, que
de haber sido correspondido su alma se elevaría a las regiones del éter, no
cabe la menor duda.
Los personajes en los que se desarrolla la trama, lo es
Juan, el incansable seductor, que se vale de todas sus experiencias acerca del
amor para persuadir a Cordelia, pero no solo eso, sino que a través de la
escritura hacia un amor que persigue desde todos los ángulos, va describiendo
una obra estética en torno a la literatura, una manera de describir los
sentimientos de un ser humano con verdadera belleza literaria y ejemplificando
el amor universal. Es lamentable cuando el ser humano inclina el alma hacia un
ser que jamás le corresponderá, pero ese amor no es posible desviarlo hacia
otra parte, pues está dirigido espontáneamente hacia esa persona por la que se
siente una irresistible atracción.
En cada página se nota lo sublime de ese amor, evoca a “Alfeo,
cuando al ir de cacería se enamora de la ninfa Aretusa, ella siempre huye de él
hasta que en la isla Ortigia se convierte en una fuente, los sentimientos de
Alfeo se lastiman hondamente, hasta que el mismo se transforma en río, el río
Elis que marcha por el Peleponeso. Pero jamás se olvidó de su amor, y al llegar
al amar un día se reunió con su amada”. Aquí es donde a su Cordelia le dice que
si ella es fuente el será el río eternamente enamorado de ella. Su formación de
teólogo lo hace vislumbrar el amor espiritual, cuando el ser supremo crea a
Adán y lo arroja al paraíso, tiempo después lo toca adormeciéndolo en un sueño
relajado, plácido y hermoso, de una costilla crea a Eva, la que será compañera
del primer hombre que habitó el paraiso, nacida del amor más sublime y
sustancial que pueda existir desde la creación.
Amable lector, no deje de leer El Diario de un Seductor,
con toda seguridad, le sublimará el alma.
Kierkegaard, nació un cinco de
mayo de 1813 en Copenhague, Dinamarca. La naturaleza, la religión y la fe en
Cristo, son el centro de su obra en general, lo consideran padre del
existencialismo. Solo vivó 42 años, pero dejo un valioso testamento
intelectual. Falleció el 11 de noviembre de 1855 en su pueblo natal
rafaelrojascolorado@yahoo.com.mx