JUAN SALVADOR GAVIOTA
JUAN SALVADOR GAVIOTA
Por Rafael Rojas Colorado
En
la década de los setenta, por vez primera, leí la historia de Juan Salvador
Gaviota. Estaba impresa en las páginas de la revista de selecciones Readers
Digest. La narración me persuadió y me dejó un grato sabor de boca. Tiempo
después adquirí el libro y volví a releer esas aventuras en las que una gaviota,
temerosa y llena de angustia e incertidumbre, aprende a volar como nadie de su
parvada lo hacía.
Juan
Salvado Gaviota, así se llamaba la joven ave que era rechazada por su parvada,
simplemente, porque no sabía volar como sus compañeras, por esta razón la
expulsan del grupo y la dejan en su soledad. Siempre mostraba su indecisión y
día a día se lamentaba de su situación. Nació con alas y a pesar de ello
le era imposible el emular las alturas ¿en qué consistía su problema? Es lo que se preguntaba en el despertar de cada mañana inmersa en la tristeza. Las gaviotas de su parvada la invitaban a desafiar el peligro y disfrutar del vuelo bajo el azul del cielo, pero solo lo hacían para buscar el diario alimento, cuando Juan Salvador Gaviota lo intentaba se avergonzaba de sus propias limitaciones, se sentía incapaz de abrir sus alas.
Un
día escuchó una voz dentro de su ser que la incitaba a descubrirse a sí misma,
entonces comenzó a practicar vuelos pequeños, fallaba a cada momento, pero
seguía insistiendo muy a pesar de los golpes que se daba contra las aguas del
mar. Fue profunda su determinación que cada vez sus prácticas mejoraban, hasta
que logró ir mucho más allá de lo que una gaviota tenía permitido por su
naturaleza. En poco tiempo su belleza y determinación resplandecía entre el mar
y el cielo, parecía flotar como una funámbula en la textura del viento a mil
metros de altura; veía la pequeñez de los riscos y de las gaviotas de su
parvada mientras Juan Salvador descubría la libertad. Ya nada la detenía ni
igualaba sus vuelos, sus acrobacias aéreas eran increíbles, pues había
despertado al verdadero Juan Salvador Gaviota que llevaba dentro de sí misma.
Esta es una bella
historia de superación personal que escribió Richard Bach. A través de la misma
nos muestra, con bellas imágenes, la vida de una gaviota que aprende a volar y a
descubrir la libertad y que nosotros también llevamos dentro de nuestro ser a
un Juan Salvador Gaviota, para despertarlo y nos señale el camino de la vida,
en esa búsqueda el mar, el cielo y el aire nos acompañará. “Un libro conduce a
la sabiduría”.