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Las sonrisas de los niños son mi mayor satisfacción

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Las sonrisas de los niños son mi mayor satisfacción

Por Fanny Duran

Es la declaración de un político, ¡no! Es la meta de un payaso, quien platica con El Regional para conocer cómo vive un payaso. Platicamos con Alejandro Lagunés, quien le da vida al mimo Pistache Popis Pus.

Alejandro inició su carrera a la edad de 8 o 9 años, se hacía llamar Mi Pistache. Desde entonces ha considerado cada evento como una meta y un reto donde puede medir sus capacidades actorales. Creando y estructurando las rutinas, e incluso, improvisándolas. Alejandro se adapta a sus diferentes audiencias, llevado diversión y, sobre todo, provocando muchas sonrisas. “Hacer es crear y el crear se pasa a la acción, de la que deriva una reacción del público”. Estar atento a esa dinámica y no darse por vencido para lograr la meta: las sonrisas”. Comenta en Popis Pus.

Para llegar a ser un payaso reconocido dentro de la región, Popis Pus tuvo que pasar por un camino de preparación. Sus primeras enseñanzas fueron de compañeros y amigos dentro de la comunidad artística, para después asistir a diversos congresos, encuentros, festivales donde participó en talleres de actuación, doblaje, maquillaje, vestuario y dinámicas de improvisación e ingenio. Alejandro ha tomado cursos de actuación en la Universidad Veracruzana, así como talleres de clown, danza y conducción en Puebla.   

Alejandro, nos cuenta: “He andado de “pata de perro”, ya que gracias a su personaje Pistache Popis Pus ha llegado al extranjero, visitando cinco países diferentes, alcanzando sus sueños y metas. Sin embargo, su satisfacción más grande es encantar a los niños.

“En realidad el carisma lo tienen los niños, únicamente uno pone la gracia para hacerlos reír, con boberías, con magias, malabares, trucos, juegos de palabras y rutinas, entre otras, dijo.

Cuando vemos felices a los niños, vemos sus rostros de alegría y sus carcajadas, esa es mi mayor satisfacción, comenta

La comunidad de los payasos ha sido una de las más afectadas por la contingencia sanitaria, dado que varios eventos tuvieron que ser cancelados. Haciendo que quienes pertenecen al gremio de los payasos buscar otras maneras para generar ingresos, como vender dulces, y hasta hacerla de albañil.

Alejandro aún sigue con la esperanza de que todo sea como antes, para poder alcanzar nuevos objetivos y metas.

Pistache se despide con una sonrisa y los mejores deseos para esta navidad y año nuevo.