MAGISTER DIX
MAGISTER DIX
René
Sánchez García
En el
número 1511 del suplemento cultural del periódico nacional La Jornada, que se
edita en la Ciudad de México (18.02.23, pag, 2), aparece una colaboración de
Febronio Zatarain con el título de El
Saltamontes, que hace alusión a aquel viejo programa de la televisión
comercial de los años setentas, donde un niño pequeño y vivaracho preguntaba a
su maestro (amante de lo espiritual y la alta meditación) cuestiones que hacían
filosofar a su profesor. Me atreví a cambiar el nombre por el de Magister Dix,
que en latín significa: El Maestro Dice.
– ¿Qué me aconseja, Maestro?
– El mejor consejo nadie te lo dará.
– =
– Maestro, ¿quién es el que me engaña más?
– Tú mismo.
– =
– Maestro, me he estado buscando y no me
encuentro…
– Búscate, pero sin que te vean.
– =
– Maestro, ¿Quién nos hizo?
– El Azar y el Tiempo.
– =
– Maestro, ¿es usted mi guía?
– No, somos corderos sin pastor, y algunos nos
volvemos lobos.
– =
– Maestro,
¿Dios existe?
– Sí.
– ¿Dónde está?
– En la Duda.
– =
– Maestro, ¿qué es aquella polvoreada?
– Es tu conciencia.
– =
– Maestro, ¿Existo?
– Antes no; ahora sí.
– ¿Por qué?
– Porque te lo preguntaste.
– =
–
– Maestro, ayer me divisé, me asusté y giré a la
izquierda.
– ¿Cómo
le hago para saludarme?
– Acepta que ya estás muerto.
– =
– Maestro, hay varios senderos, ¿Cuál tomamos?
– Todos llegan a lo mismo.
– ¿Adónde?
– A la decepción.
– =
– Maestro, ¿hacia dónde vamos?
– Vamos…nada más.
– =
– Maestro, ¿y la dicha?
– Allá…siempre en el horizonte.
– =
– Maestro, ¡la Montaña! Pero cómo le hacemos
– para
cruzar; está bravo el rio.
– Hay que esperar.
– ¿A que se calme el rio?
– No. A que la Montaña lo cruce.
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