Palabras: origen, antigüedad y sabiduría
Palabras: origen, antigüedad y sabiduría
Por René Sánchez García
Cada vez que tenemos la maravillosa oportunidad de comunicarnos, ya sea de manera oral o de forma escrita, utilizamos una serie de palabras para construir un discurso dirigido a un destinatario, del cual esperamos casi siempre una respuesta.
Todas y cada una de esas palabras, mismas que se encuentran enlistadas en cualquier diccionario de la lengua española, no sólo tienen uno o varios significados, sino que primordialmente tienen una raíz etimológica indoeuropea, protoitálica o latina.
Muchas de esas palabras, sin que lo sepamos nosotros, fueron utilizadas inicialmente por los hombres y mujeres hablantes de las lenguas portuguesas, españolas (de la península), francesas, italianas, rumanas y con la llegada de los españoles a Mesoamérica, existieron fusiones con algunas nuestras, como ha sido los casos del Náhuatl, Totonaca, Zapoteca, por citar sólo esos tres.
Todo
esto viene al caso para mencionarles que encontré un interesante libro titulado Sorpresas en palabras (año del 2006,
ediciones Tecolote, 124 p.), compiladas y seleccionadas por Krystyna M. Librora
y Gabriel López Garza, y con bellas ilustraciones de Aníbal Delgado.
El
libro en cuestión no es un diccionario, se trata de una serie de curiosidades
acerca de 118 palabras escogidas por
dichos autores, con la finalidad de ilustrarnos con su etimología y origen,
sino también que de esa raíz primaria surgen infinidad de palabras compuestas.
Este
genial juego que los autores hacen entre la palabra
y la imagen, nos lleva a descubrir entre ellas, toda una serie de metáforas
involuntarias, por ejemplo: “Cosmos” es el orden del universo y “Diamante” es
el espíritu indomable del mineral.
Como
ellos mencionan: “Las palabras están
llenas de sorpresas, guardan la memoria de los objetos e inventos, recuerdan
acontecimientos, contactos entre culturas y pueblos. Estamos tan acostumbrados
a ellas, que rara vez nos asombramos ante su sabiduría y antigüedad”.
En
una noche de éste verano lluvioso, prepárense un rico café y lean Sorpresas en palabras, y verán que como
por arte de magia su bebida se transformará en toda una delicia para su alma y
su corazón.