VELEIDOSO
Por Salvador Muñoz
Los Políticos
Uno de los mayores temores que tengo a
la hora de escribir, es ser monotemático… y así, a veces, quisiera escribir de
la Mamá Fit aunque la realidad es más cruel y vemos que quienes más rechazan
este tema son las “Mamá Fat”… o de esa rara sensación que tienes cuando
volteas y ves por acá, a un diputade, ves por allá un alcalde, y por acullá,
hasta un Gobernadore, y te sientes grupo minoritario ¡y hasta con menos
derechos!… o de las contradicciones de la tercera edad cuando ves por un lado
a la actriz Ana Martin diciendo que a sus 75 años, si ve a un hombre desnudo,
le da un infarto, porque hace 10 que dijo “good bye” (imaginamos que al sexo) y
así es feliz, mientras que por otro, con 77 años de edad, Elba Esther Gordillo
se casa con chavo de 36 años de edad y no hago más que celebrar que hay vida
sexual después de los 65 porque no creemos que la Maestra se haya casado para
que la acompañen, ¿de acuerdo? y así, pudiera seguir poniendo más ejemplos para
no caer en lo monotemático, pero ahí está Cuic, necio, insistente, aferrado, a
hacer y decir tanta barrabasada, que por más que uno quiera, es inevitable
hacerlo tema en el desayuno, en la comida, en la cena, en las redes, en
whatsapp, en todos lados… en la columna…
Ojalá uno pudiera hablar de los debates
de altura que hace al discutir un tema, pero su ego (inflado cual totol) le
hace creer que goza de una autoridad moral que roza en lo divino y no hay más
razones válidas que la que él sostiene.
Es tan subjetivo, veleidoso, voluble,
inestable, que da lugar a que se hable más de sus emociones, reacciones,
deslices, que de su política de Gobierno.
O si habla de su Política de Gobierno
es para exponer una pobreza de conocimiento o lo limitado de sus alcances, lo
que da lugar a pensar en lo fácil que es posible ser Gobernador a estas alturas
o como bien lo dijo alguna vez la magistrada Yolanda Castañeda… no expongo la
frase porque hacerlo sería enaltecer el ascenso de Don García…
Y si creíamos que no podía haber algo
peor que ser veleidoso y limitado, Cuitláhuac siempre encuentra la manera de
sorprendernos: también es arrogante, prepotente, autoritario, majadero, incapaz
de entender la mecánica de la comunicación, ni del lado de la prensa, ni del
lado del funcionario… cualquiera creería que se capacita viendo las respuestas
de Eduardo Yáñez, Bárbara Regil, Sergio Goyri, entre otros, sin ponerse a la
altura de los medios y mucho menos de su investidura que la ha de entender como
Embestidura…
Dice el amigo y compañero Iván Calderón
que le urge a Cuitláhuac un Vocero, alguien con tablas en el ejercicio del
poder que entienda dónde se está parado y dejar de ver el podium como un
escenario de “Stand Up”… yo difiero del amigo Calderón: No es que Cuic
necesite un Vocero… ¡Veracruz requiere de un Gobernador!