Especial

Y con ésta me despido

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Pocas veces una habla de la familia y de los grandes valores que la conforman. Hoy, quiero dedicar muy especialmente este espacio a Elisa Moreno Carretero (mi unica sobrina directa), y es asi como me despido de Usted querido lector que me ha hecho el favor de leer semana a semana durante casi cinco años estos pequeños pero emotivos pasajes de mi vida, arte, cultura general, datos curiosos, pero sobre todo lo mejor de mis recuerdos en mi Coatepec. Si, me despido hablando de un ser muy especial –Elisa- llena de talento, simpatia y gran  belleza. Ya he tenido oportunidad de platicarle de mi madre, de mi hermana, de mis talentosos hijos, pero nunca habia comentado acerca de     “Lisy”, como yo de cariño le llamo.

Recuerdo el dia que nació. Fue un 13 de mayo del año 1989, ¡y como no recordar ese día, si Coatepec parecía un horno!, independientemente de la felicidad de mi hermana, pues habia dado a luz a una pequeña cachetoncita y ojona. En ese tiempo yo vivía en la ciudad de Puebla, tomé a mi hija Andrea que apenas tenia ocho mese de edad y esperaba a mi segundo hijo “Leo”, así que iba con ocho meses de embarazo,  ¡ya se imaginará Usted querido lector el calor que yo, de suyo ya llevaba!, fue horrible. Todo pasó: mi hija enfermó, tenia temperatura y, lejos de ayudar a la recien parida –mi hermanita Elichabe-, creo que rersultamos un peso mas. Recuerdo y sonrío, pues los tan solo dos dias que pude quedarme por las cierunctrancias que ya le he comentado, mi hijita Andrea y una servidora nos la pasamos casi todo el tiempo en la tina del baño de mi recamara de soltera, pues solo así es que pude hacer una poquita de “compañía” a la familia en el nacimiento de Elisa.

Han pasado los años y ahora Lisy es una gran profesional; estudió en el colegio las Hayas, nunca en el grupo de su madre y sin embrago siempre ha sido brillante en sus estudios, toda su trayectoria escolar fue espectacular, creo que en toda su vida de estudiante si acaso tendrá en su haber uno o dos nueves, incluso en su licenciatura que llevó a cabo en el ITESM, comunmente conocido como el Tec de Monterrey, campus Puebla. Extra escolarmente tomaba clases de frances desde muy chica en la alianza francesa de mi natal Xalapa, fueron años de levantsarse los sabados muy

temprano para llegar a tomar dichas clases hasta que concluyó el idioma, el inglés, sin problema, pues lo llevó desde primaria hasta bachillerato. Así, asi es como se van forjando los grandes talentos, con dedicacion, entusiasmo y disciplina.

 

 

Y a mi, no me queda mas que agradecer profundamente al querido profesor Ruben Monzon por haberme dado la oprtunidad de compartirles mis nostalgicos recuerdos a lo largo de todos estos meses que me llenaban muchas veces de lagrimas mis ojos; haciendo mi mejor esfuerzo para ubicarle a Usted mi lector fiel en otra epoca de cuando Coatepec verdaderamente era un paraiso. Su gente buena, sus calles seguras, los muchachos y muchachas sanos; asi mismo quiero agradecer a Mary Paz Monzon y Hector Larios por permitirme colaborar tomados de la mano para hacer posible la relaizacion de “COATEPECANA DE CORAZÓN”.

 

Hoy termino la primera temprada, ¿Cuándo vendrá la segunda temporada?, no lo se, pero siempre es sano darse espacios y regresar con nuevas ideas, con nuevos brios y, ¿por qué no?, con nuevos recuerdos…

 

Reciban mis COATEPECANAS Y COATEPECANOS mi cariño y agradecimiento eternos. ¡Los quiero!.

 

 

¡GRACIAS, GRACIAS, GRACIAS!

“El agradecimiento es la memoria del corazón”. Lao-tsé (570-490 a.C). Filósofo del Taoísmo.

 

 

E mail: normacarreterorojano@hotmail.com

 

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