Beneficios de la reforma de telecomunicaciones
Por: Linda Rubi Martínez Díaz
Hola amigos lectores, les saludo con el cariño de siempre. En los últimos años, hemos confluido en el debate de ideas para configurar las reformas sociales e institucionales que marcarán el progreso de nuestro país en la próxima década, razón por la cual es importante señalar la necesidad de ellas y comprenderlas para no caer en el malentendido y la sobreinformación que circula en las redes que, en lugar de aclarar, tienden a generar confusión en la población. Por ello, me parece relevante tomar en cuenta en este espacio, la reforma de telecomunicaciones, la cual debe ser comprendida en su dimensión histórica para mostrar que ya está dando resultados palpables, y aún quedan más por venir.
Antes, las llamadas telefónicas a larga distancia cobraban una tarifa diferenciada con respecto a las locales, y eso cambió hace pocos años, aunque así prevaleció por mucho tiempo. Peor aún: las llamadas internacionales eran siete veces más caras si se hacían desde México. Hace apenas un lustro, el uso del celular ya era necesario, pero aún no se nos ofrecían tarifas competitivas en relación al resto de países dela OCDE. No es casualidad que, gracias a ello, el empresario más rico del mundo en este tiempo fuese mexicano y en este sector. La reforma, por tanto, era necesaria no solo para beneficiar a la colectividad sino para mostrar que la mala distribución de la riqueza se debe a anomalías del mercado, como los monopolios.
Gracias a esta reforma, hoy tenemos mejoras en nuestros derechos fundamentales de expresión y acceso a la información, se van equilibrando los competidores en el usufructo de nuestro espectro radioeléctrico; se fortaleció la parte institucional reguladora de las empresas, necesaria en un estado de derecho; se están atacando a los monopolios, así como se está propiciando una mejora en la infraestructura, dado que estamos en desventaja tecnológica en relación a otras economías similares. Esto tiene como consecuencia el que podamos elegir entre una amplia variedad de servicios de telefonía a un menor costo.
Creo que esta reforma ya se palpa en el bolsillo y va por buen camino a consolidarse. De esto casi no se habla, pero creo que debemos recordar cuando era más caro llamar con un celular ordinario a ahora, que con un smartphone podemos hacer eso y más servicios, con menor costo.
Nos leemos la próxima, que Dios los bendiga.